Las 3 mecedoras perfectas para descansar en mis vacaciones (y ya tengo el rincón ideal para instalarlas)

Todos estamos de acuerdo en que no hay nada más relajante que sentarse en una mecedora y disfrutar de la tarde con un café y un buen libro, ¿no? Si no lo has experimentado, te lo recomiendo. Las mecedoras son el mueble estrella para descansar desde la comodidad del hogar. Y aunque es una pieza que solíamos encontrar en la casa de nuestros abuelos, lo cierto es que las últimas tendencias demuestran que vuelve a estar de moda en el diseño de interiores. ¡Gran acierto!

Hoy compartimos contigo tres modelos de mecedoras que te ayudarán a descansar y desconectar estas vacaciones. Ya sea para ubicarlas en el salón, en la terraza o en un dormitorio, todas cumplen la misma función: apagar la mente y reconectar con el placer del dolce far niente.

1. Perfecta para tomar la siesta

Tan cómoda como mullida, ideal para salones o dormitorios.

No es raro que sentados en una mecedora, nuestros ojos sucumban a una siesta involuntaria. La verdad es que es el proceso natural del cuerpo ante un estado de relajación.

Este modelo es todo lo que necesitas para tomar una siesta reparadora de quince minutos (o de varias horas, si es que se te va de las manos). El tapizado de chenilla la convierte en una pieza suave al tacto. Además, el color beige aporta serenidad visual y versatilidad. Es perfecta tanto para una decoración moderna como para una rústica o naturalista. 

Destaca el respaldo alto y los brazos laterales sólidos que incrementan la comodidad de la silla. Está fabricada con una estructura de acero y las curvas son de madera de haya. Ubicarla en el salón, justo al lado de una lámpara de pie que aporte luz focal, sería una buena elección. 

2. Moderna y elegante

Sus colores profundos y sofisticados elevan el diseño de esta mecedora.

La mecedora The Penguin es tan elegante como profunda y serena. Una pieza hecha para el descanso y la reflexión, encaja perfectamente en una esquina de la oficina o estudio. ¿Te has cansado de trabajar frente a la pantalla y necesitas unos minutos para pensar en silencio? El movimiento suave de esta pieza es ideal para activar la creatividad o tomar un breve descanso en mitad de la jornada. 

Como su nombre lo indica, la estructura metálica de color negro está inspirada en la fisionomía de los pingüinos. Un ave de caminar tranquilo y que tiende al balanceo, tal como hace esta particular butaca. 

El respaldo está chapado en nogal o roble, lo que intensifica ese aire robusto, pero a la vez sutil. Asimismo, el asiento lo fabrican tapizado en cuero o lana, lo que añade un punto de calidez y confort. The Penguin fue diseñada por el arquitecto danés Ib Kofod-Larsen en 1953. 

3. Un modelo icónico

Un modelo veraniego, pensado para el descanso.

Finalmente, no podemos dejar de mencionar otro clásico de las mecedoras: la Rocking Armchair Rod Base (RAR). Fue creada por la pareja de diseñadores Charles & Ray Eames en 1950 y pertenece a la colección Plastic Chairs RE de los mismos autores. 

Un diseño fresco, ideal para pasar las vacaciones de verano. Y es que el asiento fabricado en plástico la convierte en un modelo ligero, versátil y fácil de transportar dentro de casa.

Puedes ubicarla cerca de la ventana del salón para aprovechar la luz natural o situarla en la terraza durante la temporada de calor. Su estructura de metal y las patas fabricadas en madera de arce la convierten en un mueble apto para casi cualquier estilo. Queda bien tanto en ambientes modernos o minimalistas, como en una estancia nórdica con aires rústicos. 

¿Ya decidiste cuál es el modelo que encaja con tu estilo? Inspírate y conoce otras mecedoras que le darán un toque zen y relajado a tu hogar, dulce hogar.