Las cocinas abiertas han causado furor, es innegable. Una tendencia que ostenta estructuras diáfanas y distribuciones definidas. A menudo, se utilizan separadores para diferenciarlas del salón: paneles, biombos o barras de cocina. Esta última pieza llama la atención, ya que es un mueble que hace de encimera, pero también de mesa.
La mayoría de personas utiliza la isla de la cocina tanto para preparar alimentos como para servir las comidas diarias. De hecho, en términos decorativos se ha transformado en un verdadero punto focal. Hay islas que gozan de un estilismo tan bien cuidado, que muchas veces no hace falta incorporar una mesa de comedor, sobre todo en pisos tipo loft o espacios pequeños.
En este contexto, destaca la importancia de los taburetes que circundan la isla de la cocina. Son muebles que deben ser cómodos y funcionales. Normalmente, son altos y estrechos, lo que facilita el ahorro de espacio y aligera visualmente el lugar. Sin embargo, idealmente deberían ser ergonómicos y resistentes. Hoy te contamos qué debes tener en cuenta para que comer en las alturas sea una experiencia grata y distendida.
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