La tatuadora y empresaria Kat Von D deja la caótica Los Ángeles para mudarse a Indiana, por lo que ha puesto su casa a la venta por un precio de 15 millones de dólares. Se trata de una mansión de la época victoriana construida en la década de 1890 y distribuida en tres plantas, ubicada en un barrio con más edificios históricos que atrae como vecinos a actores y celebridades de Hollywood.
El exterior, de ladrillos granates, y las esculturas clásicas del jardín con forma laberíntica hacen de esta casa el escenario de una novela gótica, potenciando el factor sorpresa cuando al llegar a la parte trasera se descubre la piscina de la propiedad, con agua roja, como si estuviese teñida en sangre. Además de once dormitorios, ocho baños, una biblioteca y diferentes espacios de sala de estar, en la planta de arriba de la casa se puede encontrar un teatro con minibar y otra dependencia aparte con dos dormitorios encima del garaje.
Por último, ya que se ubica en Los Ángeles, una curiosidad cinematográfica: aquí se grabó una película. No, no fue la adaptación de Cluedo o un biopic sobre Mary Shelley, fue la comedia familiar de Doce en casa con Hilary Duff y Steve Martin como protagonistas. Nada que ver. .