Aunque está situada en un rincón, la cocina de este piso brilla con luz propia. Es solo uno de los ejemplos de la buena planificación de este piso en Suecia con pocos metros pero muy bien aprovechados.
La decoración también es una aliada que permite percibir los espacios más grandes de lo que son: un espejo aquí o unas molduras allá, consiguen resultados mágicos. La gama cromática también sopla a favor: blanco, beige y negro se combinan para dar lugar a espacios con encanto y textura.