Un diseño abierto y atemporal domina los grandes espacios creados en esta casa de 420 metros cuadrados diseñada por Oskar Firek Architectes en Cracovia. Los materiales aquí se convierten en elementos diferenciadores de las estancias y en los absolutos protagonistas de los interiores. Los grandes espacios abiertos se tornan acogedores con el uso de la madera en suelos, artesonados, tabiques y mobiliario. Junto a ella, materiales naturales como yeso de arcilla y piedra, aportan calidez y carácter al interior.
"El aspecto más desafiante fue diseñar espacios grandes, considerando el tamaño relativamente grande de la casa en comparación con la cantidad de habitaciones", explican desde el estudio de arquitectura. "Los espacios abiertos se dividieron visualmente utilizando técnicas como bajar el piso, agregar un artesonado en la sala de estar e incorporar tabiques de madera en las paredes, a menudo integrados perfectamente con los muebles", añaden. El espacio sirve como un excelente telón de fondo para obras de arte, incluidas pinturas de Adam Bakalarz y Grzegorz Worpus, así como esculturas de Paweł Jach, que se integran perfectamente en el entorno.