Para que el dios Morfeo se apodere de nuestros sueños, no hace falta un milagro divino, sino una decoración serena. El dormitorio es la estancia dedicada al cuidado personal más exigente, ya que es donde reposamos nuestras ideas y descansamos para reponer energía. Por estas razones, no debemos escatimar en elementos que potencien estos factores, cómo puede ser una mesita de noche o la cama. Esta última debe cumplir con las condiciones de que el diseño y la comodidad estén igualados en una balanza. Para conseguirlo, pensamos en una cama -y colchón- que se caracteriza por su calidad, ser un clásico entre clásicos -más de 160 años de historia- y, por supuesto, transmitir lujo silencioso en el dormitorio: las camas Hästens.
En la última temporada, el lujo silencioso ha sido una de las tendencias más destacables en interiorismo. De hecho, su adjetivo es el más idóneo para definir el ambiente que debe tener un dormitorio, tanto literal como metafóricamente. Los modelos tradicionales -con sus característicos cuadros vichy- de la firma Hästens se sitúan entre los más elegidos para que la estancia siga esta tendencia y la decoración llegue a su máximo esplendor.
Pura esencia escandinava
Los nórdicos son grandes conocedores de cómo hacer ganar calidez y comodidad a un espacio. El estilo escandinavo destaca por no sobrecargar las estancias y realzar la funcionalidad, dos puntos muy importantes para que el dormitorio sea sereno. Esta cama refleja con claridad estos valores, ya que su diseño clásico es muy idóneo para los ambientes minimalistas. Se podría decir que es una de las primeras en marcar la esencia de estos países europeos, ya que sus modelos iniciales se remontan al 1852.
Las camas Hästens tienen un alcance universal. Las casas más elegantes han recurrido a la firma nórdica con el objetivo de elevar el confort y el estilo en su dormitorio, ya que su colchón destaca por su gran calidad. Los materiales que utilizan para darle forma es la lana y el algodón, dos grandes componentes para que sea muy resistente. Además, los cabeceros de sus gamas más destacadas, como el Vividus o el Grand suelen estar tapizados.
Los diseños de la marca son unos adelantados a su tiempo. Aunque mantenga su estética más vintage, tiene unos acabados de cuadros vichy muy modernos. Este estampado es uno de los que está de moda actualmente, por lo que el dormitorio obtiene la síntesis perfecta. Un punto a favor es que esta estética no queda opacada, ya que es típico de estas camas dejar la zona del canapé descubierta de textiles, para que se reconozca con facilidad su origen.
Otros elementos imprescindibles para un dormitorio de lujo
Mesita de noche actual
El juego de las formas y geometría es una corriente que nunca se ve desfasada. Esta mesita de noche, obra de Claudia Comte, es una gran aliada para integrar el estampado de rayas en un ambiente contemporáneo sin que se vea recargado. Recurre a las tonalidades clásicas, blanca y negra, para aportar estilo y sumar lujo al espacio.
Lámparas de mesa modernas
El azul eléctrico es muy idóneo para sumar contraste en las estancias frías. Tiene mucho poder de contraposición con los tonos neutros y nunca pasa de moda. Para que no quede excesivo, lo puedes integrar en una lámpara pequeña y discreta, colocada justo encima de una mesita de noche.