Las mamparas han sido durante mucho tiempo grandes protagonistas del baño. El vidrio templado traslúcido y su función corredera —especialmente en algunos diseños— han sido razones clave para elegir esta opción. Sin embargo, con el paso de los años, pueden resultar no la mejor opción para algunos. Si buscas una alternativa, los muretes, una solución que siempre ha estado ahí, merecen ser considerados.

Este elemento de obra es la opción más resistente para acabar con la entrada del agua al resto del baño. Dan la sensación de que la distribución de la estancia ha sido elaborada y bien organizada. Además, tiene la capacidad de separar el espacio de una forma armónica.

Por qué los muretes y muros de obra son una gran alternativa

Baño con murete

Revestimiento con azulejos artesanales, de Auga de Parada. Jarrón y arreglo floral, de Verdelar. 

Eugeni Pons | Arquitecto: Francisco J. Corredoira

Un baño con murete es todo un acierto. No suelen ser muy extensos y no invaden toda la altura de la estancia. De este modo, la parte superior está abierta al resto del ambiente. Y para que el agua no se escape por esta zona, en ocasiones se suele optar por hojas fijas completamente traslúcidas. 

La integración de un murete en el baño requiere obra que puede ser al momento de diseñar un baño nuevo o a través de una reforma. En ambos casos es clave asesorarse por un arquitecto o interiorista.  

baño tonos naturales mampara murete de obra - casa putxet

Pinta el murete de tonos serenos y lisos. 

Salva López

Uno de los puntos más fuertes de los muretes es la de cómo aprovecha el espacio. Su presencia distribuye las zonas del servicio, renunciando a las grandes paredes y a las puertas que no aprovechan los metros disponibles. 

Para revestirlo, puedes optar por diferentes alternativas. Una de las más sobrias es la de continuar con el hormigón del baño, si es el material predominante de la estancia. Por otro lado, puedes escoger unos azulejos clásicos y de tonalidades no muy llamativas, como son los neutros o los matices azulados, con el objetivo de que no rompa con la estética de la estancia.

Opciones variadas para integrar el murete en el baño 

Baño en suite con murete

Lavamanos de mármol. Bajolavabo con madera de roble, diseño de Quadratmeta. Ropa de cama de lino, de Filocolore. Silla vintage Safari Antigua. Suelo radiante. 

Eugeni Pons | Interiorismo: Quadratmeta Studio

Para baño en suite 

Los hay que optan por incorporar una pequeña hoja en la superficie alta del murete para que no se escape ni una gota de agua. Sin embargo, si se pone un sistema unidireccional en la columna de la ducha, no hace falta incorporar estos elementos. Un ejemplo de ello es este baño en suite. Este elemento separa las estancias de forma orgánica y el espacio gana un toque diáfano muy moderno y práctico. 

murete Eugeni Pons

El muro de este baño separa la zona de la ducha del lavabo suspendido.

Eugeni Pons

Elección extensa 

Los muretes se caracterizan por no ocupar gran parte de la altura del baño. Sin embargo, algunos modelos están diseñados para extenderse hasta el techo, ofreciendo mayor privacidad al ocultar gran parte de la ducha. La pieza de la imagen destaca por su diseño estrecho y su revestimiento de mármol.