Los espejos son esos elementos de la decoración de la casa que tienen mucho que decir y que aportar, si se les deja. Amplían los metros, favorecen la luminosidad, permiten jugar con las perspectivas, son prácticos en el día a día, potencian las vistas y realzan la decoración con su presencia. Por eso, saber usarlos a tu favor es fundamental para rentabilizar su potencial . Estas siete claves te dan las pistas. Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en Arquitectura y Diseño suscríbete a nuestra newsletter . Aliados en la entrada Aunque no hay estancia que se les resista, en el recibidor ofrecen la mejor bienvenida. Muy prácticos para echar un vistazo antes de salir de casa, además son muy eficaces a la hora de aportar profundidad y luz en entradas pequeñas y oscuras. En función del efecto que buscas, puedes colgarlo , como aquí, y lograr un resultado más formal, o apoyarlo en el suelo o la consola y crear una atmósfera menos seria. El formato ideal dependerá de las dimensiones del espacio y de tu estilo , como norma general en entradas grandes encajan bien los modelos cuadrados y rectangulares con o sin marco y en las mini y estrechas los redondos. Diseños para todos los gustos Los espejos resultan muy funcionales, pero además son elementos decorativos casi sin pretenderlo. La variedad de diseños, formas y tamaños les permite adaptarse a cualquier estilo y tamaño de la estancia sin perder fuerza visual ni opciones prácticas. Solos o acompañados , hay un modelo para cada habitación. Redondos , cuadrados o rectangulares , con marco , sin él o con cuarterones , como este, sin olvidar las paredes de espejo que han abierto una nueva perspectiva en los interiores actuales. Claves de estilo En cuestiones de estilo, la forma también importa . Por eso, no solo hay que elegir el lugar idóneo para colocarlos, sino cómo llevarlo a cabo. Puedes hacerlo de uno en uno , formando composiciones armoniosas o en modo tríptico o pared. Como norma general, procura no poner dos espejos iguales en una pared para no caer en el aburrimiento, si solos colocas uno , evita que quede perfectamente centrado y si te decides por varios , vigila que no sean demasiados para no recargar, siempre que no busques crear un efecto tabique. El cómo y el dónde Disponerlos adecuadamente en el espacio también es una buena manera de multiplicar sus poderes mágicos . Por eso, no es lo mismo colgarlo que apoyarlo en un mueble o posarlo en el suelo . Cada colocación produce un efecto más o menos formal y más o menos decorativo. Así, un espejo XL apoyado en la pared aportará un toque de estilo personal y se convertirá en un elemento central de la decoración, al igual que situado sobre la chimenea . Un lugar en el dormitorio Aunque en el recibidor, el salón o el baño tienen un hueco de honor, los espejos también pueden hacer mucho por la decoración del dormitorio . En las puertas de los armarios son una buena opción para dar profundidad y perspectiva, mientras que en paredes enfrentadas duplicarán sus efectos y colgados serán tan decorativos como prácticos. Eso sí, según el feng shui , no son recomendables en la pared frente a la cama. Objetos decorativos Aunque su labor práctica es determinante, los nuevos diseños y formatos les han convertido por sí mismos en auténticos objetos de deseo deco. Formas, diseños y colores se alían cada año, creando modelos que pueden presumir de ser auténticas obras de arte . En estos casos, lo ideal es que les despejes el terreno para que brillen en solitario. A favor de la funcionalidad Porque a pesar de su poder decorativo y ese halo especial que irradian, no debemos olvidar que son un elemento práctico en el día a día, especialmente en lugares como el cuarto de baño o el recibidor , donde no podríamos vivir sin ellos. Puestos a elegir en el baño resultan más convenientes los modelos sin marco y retroiluminados porque ofrecen mayor sensación de amplitud . Aunque los rectangulares pueden ser más funcionales, lo cierto es que los diseños curvos o con formas irregulares tienen un efecto decorativo más potente, al que es difícil resistirse.