En una tranquila y céntrica calle de un solo sentido de la ciudad sueca de Gotemburgo, se encuentra este mini piso que es pura esencia nórdica. Se ubica en un edificio de 1926 con patio y zona verde y todo destila encanto en esta vivienda de una habitación decorada con calidez. Suelos de madera, predominio del color blanco, techos altos, puertas originales y bien conservadas y grandes ventanales orientados al suroeste para que la luz del norte de Europa se filtre al interior contribuyen a dar calidez al piso en el que hay una habitación. Te invitamos a ver la decoración de interiores que han hecho en estos 58 metros cuadrados tan bien aprovechados.