El estudio londinense RISE Design Studio ha impregnado su estilo funcional y acogedor a esta vivienda, cuya reforma y ampliación ha encontrado en la madera de abeto Douglas su elemento unificador. Gracias a ella se han revestido paredes y techos, se ha diseñado mobiliario a medida y se han llenado de vida ciertos huecos de ventanas. Tal es el caso del rincón de lectura habilitado junto al comedor y con vistas al jardín, en la planta baja, y del mirador situado en el desván de la casa.
Los volúmenes de los espacios internos han evolucionado partiendo de una revisión de la distribución existente, a fin de sacarle el máximo potencial, y luego dando nuevas formas a estos volúmenes, enmarcando las vistas y creando aperturas clave, entre ellas la envoltura acristalada sin marco que se extiende por la cubierta hasta el lateral de la cocina, y que marca la fracción entre lo viejo y lo nuevo.
De los tres niveles con las que cuenta la vivienda, el inferior se destina a zona social y de día, donde el salón, por un lado, y el comedor y la cocina, por otro, conviven en una planta abierta que se extiende hacia el jardín, solo interrumpida por un área de lavadero, cuidadosamente diseñada. La primera planta está compuesta por las habitaciones de los niños, decoradas con detalles de madera y otros materiales naturales, y por un impresionante baño familiar que permite bañarse bajo la luz natural que se filtra desde el techo superior. En un nivel superior se sitúa el dormitorio principal, un espacio que se pliega en sus esquinas con bellas soluciones de almacenamiento y que incluye un segundo medio piso que se extiende hacia arriba como una torre a modo de desván donde poder leer o mirar hacia afuera desde las alturas del techo.
