Imagina poder transportarte a la Época Medieval con tan solo pasar por una entrada. Y es que esto es posible hacerlo en España, en concreto, en Segovia. En esta provincia castellano-leonesa se encuentra Pedraza, un pequeño pueblo de 358 habitantes (datos del Instituto Nacional de Estadística en 2023), que alberga diferentes joyas arquitectónicas pertenecientes a la Edad Media.
Se estima que los primeros habitantes de Pedraza son del siglo IV a.C. No obstante, no fue hasta el s. XI d.C., después de la Reconquista, que el pueblo alcanzó un gran renombre. Un ejemplo material de ello es la Puerta de la Villa, la única vía para acceder al pueblo amurallado, que destaca por sus grandes puertas de madera.
Recuerda que puedes buscar nuestro canal de WhatsApp de Arquitectura y Diseño y darle a seguir o bien acceder directamente mediante este enlace.
Pedraza, un pueblo bajo la sombra medieval
El municipio segoviano estuvo bajo el mando del sistema señorial desde el s. XIV hasta el s. XIX. Diferentes nobles de la época se instalaron bajo la Casa de Velasco, perteneciente a Bernardino Fernández de Velasco, que se dio a conocer por ser el primer duque de Frías y adquirir el señorío del pueblo. Durante este tiempo, Pedraza destacó por ser un núcleo de producción de textiles muy importante, en concreto, por su trabajo con la lana merina.
El eje principal del pueblo, y el que mejor refleja la historia y estilo arquitectónico de la zona, es la Plaza Mayor de Pedraza. El centro de la localidad cuenta con diferentes edificios que han marcado su historia. Un ejemplo de ello, es la Iglesia de Santo Domingo, datada en el siglo XII. Además, aquí se puede encontrar la unión de las diferentes calles del pueblo y la estética de las viviendas castellanas, en el que destacan el uso de la piedra.
Los secretos de Pedraza
Otro punto que no te puedes perder de Pedraza es su castillo. Fue construido en el s. XIII y rehabilitado en el s.XV. El monumento más alejado del centro del pueblo destaca por ser uno de los enclaves más antiguos del continente y albergar diversas leyendas sobre las personas que lo habitaron. Su renovación más reciente fue en 1926, cuando el artista Ignacio Zuloaga se quedó con el castillo y restauró parte de la construcción, como la torre.
Además, uno de los puntos de interés más destacados es la cárcel medieval. Se encuentra justo en la vía de acceso a la villa y refleja cómo era la justicia de la Edad Media. Las autoridades lanzaban a los prisioneros a este hueco bajo tierra y estaban sometidos a unas condiciones infrahumanas.
Un entorno lleno de naturaleza
Desde Pedraza, se puede disfrutar de un entorno verde lleno de fauna y flora autóctona. La sierra de Guadarrama viste parte del pueblo, que se encuentra entre los ríos de Vadillo y Encinarejo. Además, se encuentra justo al lado del Parque Natural de las hoces del Río Duratón. Este paraje idílico es conocido por tener un gran cañón y un terreno muy rocoso.
En este lugar se puede disfrutar de una experiencia natural única. Los animales más característicos de la zona es el búho real o el águila imperial, entre otras aves típicas del entorno. Además, también se puede conocer un edificio que sobresale en el parque natural, la Ermita de San Frutos, construida entre el siglo VII y XII.