Recuerdo las tardes de verano, en casa de mis abuelos, sentada después de comer y entrando en un sueño profundo en su mecedora. Una siesta en una silla de estas características se vuelve una idea magnífica, tanto como esta mecedora que hemos encontrado en Zara Home y que no solo nos trae a nuestro lado los veranos de nuestra infancia, cálidos y reconfortantes, sino que nos lleva a algunas piezas icónicas (y su historia) que hemos querido recordar en este artículo.
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En madera y trenzada, al estilo original
En Zara Home tienen una mecedora de madera que es ideal para convivir con la nostalgia del pasado y el sosiego y la ternura del hogar de nuestra abuela. Su estructura es de madera y su asiento está trenzado de fibra vegetal, lo que le da un aspecto de antaño y mucha calidez.
En concreto, está hecha en un 75% de madera de fresno y en un 25% de seagrass, y precisamente por sus materiales se recomienda protegerla de la lluvia, el agua y la ropa húmeda. Sus medidas son de 92 (alto) x 58,5 (ancho) x 80,5 (fondo) cm. Su precio, 259 euros.
REF. 8359/073.
La mecedora, un clásico dentro de los clásicos
La historia de esta silla se remonta a hace más de 150 años, obra de Gebrüder Thonet. Es todo un emblema en el diseño, la precursora de las actuales mecedoras a nivel mundial, y podríamos decir que también es de las más copiadas y la más conocida.
Michael Thonet ideó en 1856 un método muy innovador para curvar la madera maciza gracias a calentarla con vapor de agua, y en 1860 introdujo la primera mecedora que constaba de unas patas que formaban una elipse extendiéndose en los reposabrazos. El asiento y el respaldo se basaban en caña trenzada y se volvió un sello de la casa. El 2009 fue otro año clave, ya que Thonet lanzó una edición de coleccionista con 25 artículos únicos para los amantes de esta pieza, que ya es todo un clásico.
Otros diseños de gran calibre
Dentro de todas las mecedoras que se han ido produciendo a partir de este modelo tan icónico, encontramos distintas creaciones de diseño que son también referentes.
Una forma distintiva y con mucho carácter
Entre ellas, debemos mencionar la mecedora RAR, de Ray y Charles Eames, para Vitra. Se desarrolló en 1950 en plástico, y posteriormente pasó a emplearse propileno con el objetivo de mejorar su comodidad. Tiene unas patas de acero sobre patines de madera y una forma particular, aspectos que hacen que tenga su propia identidad.
Contemporánea y singular son sus adjetivos
También necesita una especial mención el modelo Nub, de Patricia Urquiola, para Andreu World. Su estructura es de madera maciza de haya, y cuenta con una auténtica labor de ebanistería para producirla. Su respaldo es muy distintivo, puesto que está conformado por varillas que generan un diseño geométrico en la parte baja, e incorpora un cojín tapizado como asiento. Urquiola elaboró así una versión actual de la mecedora clásica, más contemporánea y singular, que se exhibió en 2011 en la Feria de Milán.