Las 10 mejores casas con piscina para refrescarte este verano

En Malinalco (México), junto a templos prehispánicos, encontramos la Casa Mague, que expresa en su forma y su construcción la creencia de aquellos pueblos en la naturaleza. Los arquitectos Mauricio Ceballos Pressler, Francisco Vázquez y Marco Antonio Severino han sabido situar la piscina junto a la pirámide alusiva a un antiguo ceremonial.

El estudio de arquitectura SAOTA diseña esta vivienda con el objetivo de abarcar la mayor parte del entorno posible y, ya puestos, regalar unas panorámicas de infarto de la capital sudafricana y sus alrededores. En la segunda planta, una terraza se extiende hacia la ciudad sobre una plataforma de madera que descansa junto a una piscina infinita.

El estudio Wiel Arets firma esta casa en Marbella en la que la protagonista absoluta es una espectacular piscina en voladizo. El potente voladizo de hormigón que contiene la piscina se eleva sobre las construcciones vecinas para generar vistas atractivas desde la terraza

El arquitecto Osvaldo Luppi es el creador de Villa Boscana, una casa metida en la montaña frente al mar Mediterráneo con una de las mejores vistas de Mallorca. La piscina ha sido diseñada llevando al límite el efecto óptico de infinitud de la lámina de agua. 

El estudio de arquitectura Barclay & Crousse ha construido esta villa de piedra que se funde con el árido paisaje del desierto peruano. El pabellón más bajo en la pendiente contiene el dormitorio principal y un patio que conecta con la piscina. Esta continúa con el paisaje y se funde con la perspectiva del océano Pacífico.

La 'pura vida' de Costa Rica se puede experimentar al máximo en esta casa diseñada por los estudios checos Refuel Works y Formafatal. Inspirada en el paisaje tropical del entorno y los edificios brutalistas de Rafael Mendes da Rocha, bañarse en su piscina es todo un privilegio teniendo en cuenta las vistas del lugar.

Sobre los acantilados de la costa levantina de Ibiza se encuentra esta casa diseñada por Planas-Torres & Asociados a partir de una vieja edificación. La piscina es el elemento principal de esta casa. El inmenso azul de la isla de Ibiza se apodera del paisaje de la piscina, cuya lámina de agua adopta el mismo tono que la superficie del mar, refleja la nubes a su paso y refracta los rayos del sol.

En este oasis de Ibiza, diseñado por Jaime Sierra, se produce un diálogo acertado entre modernidad y tradición recurriendo a elementos de la arquitectura típica ibicenca. Como no podía ser de otra forma, cuenta con una espectacular piscina. La lengua de agua de 25 metros de largo otorga a la fachada sur una imagen moderna y rotunda. 

Este moderno refugio en contacto directo con la naturaleza es uno de los proyectos del estudio Perkins + Will en la localidad brasileña de Ribeirão Preto. Y lo confesamos, su piscina nos ha cautivado, y no nos extraña, pues es uno de los elementos más llamativos del proyecto. En combinación con las superficies de hormigón y los planos de madera, sobre sus aguas se reflejan parte de los exuberantes jardines que la rodean en un equilibrado juego de elementos que hacen del lugar algo casi paradisíaco.

El Lago di Como se ve de otra manera desde Villa Molli, el ambicioso proyecto del arquitecto Lorenzo Guzzini. Es una vivienda de piedra de sobrada personalidad y dramatismo con una espectacular piscina infinita construida para la ocasión con una fuerte función arquitectónica y simbólica.