Los ventanales enormes tienen la capacidad de transformar cualquier interiorismo a la vez que permiten que la vista se convierta en un elemento decorativo más. De grandes dimensiones, son las protagonistas de estos once dormitorios por su ubicación, diseño y, en la mayoría de los casos, las panorámicas que ofrecen. Acaparan miradas y las hay para todos los gustos, desde diseños horizontales que también funcionan como cabecero hasta las que ocupan toda una pared y funcionan como un cuadro natural. Con vistas a la ciudad o a la naturaleza salvaje, los hay para todos los gustos. Estos dormitorios con grandes ventanales hacen que soñemos con dejar que la luz se filtre a raudales en nuestra habitación más privada de la casa.