Un spa en Ibiza y un hotel en Santander: lo último de la interiorista Sandra Tarruella que redefine el lujo

Si hablamos de interiores exquisitos, hablamos de Sandra Tarruella. La interiorista lo ha vuelto a hacer. Después de vacaciones nos vuelve a envolver con su elegancia exquisita, trasladada a un spa en Ibiza y a un hotel en Santander. Pero vayamos por partes. 

Salón de belleza del spa del Ibiza Gran Hotel, por Tarruella. 

Lujo wellness en Ibiza

Ibiza. Un spa en un hotel, ni más ni menos que el Ibiza Gran Hotel, un lugar de cinco estrellas gran lujo donde se cuida hasta el más mínimo detalle. "Nos han encargado la reforma del Open Spa aprovechando que se querían reordenar algunas de las piezas que formaban este conjunto. Se ha querido unificar la estética de todos los espacios que conforman este Spa, desde la recepción y tienda, pasando por el salón de belleza y el gimnasio, hasta la zona de aguas y wellness", declara Tarruella. 

El gimnasio tiene un agradable aroma hogareño. 

El resultado es una atmósfera elegante, tranquila y relajada. Para ello, han acudido a materiales naturales como son la piedra, la madera, la pintura a la cal y el barro. Para el espacio fitness, han creado una caja de madera. Tanto el pavimento como las paredes están revestidas en este material, y en el techo han colocado un entramado de lamas que ocultan las instalaciones y el acondicionamiento acústico de la sala. En la zona de aguas y wellness, para revestir la totalidad del baño de vapor, se ha buscado un Travertino natural con una veta muy distintiva que convierte esta sauna en un espacio muy especial. 

Bienvenidos al Hotel Rhin Garden de Santander. ¿En qué puedo ayudarle? 

Un oasis en Santander

Viajamos a Santander para conocer el otro proyecto que estrena Tarruella, el Hotel Rihn Garden. Un edificio rehabilitado con un total de 26 habitaciones y zonas comunes. Un oasis de tranquilidad con un maravilloso jardín con piscina.

El espacio recepción-salón-distribuidor está pensado como la entrada de una casa. Con alfombra de Nani Marquina, sofá de lino inspirado en los 50 y armario trasero de seda, todo en tonos tostados buscando confort y cuidado. 

En el interior, predominan los tonos neutros complementados con vigas de madera a la vista y mobiliario en nogal. La selección de tapizados atemporales y espejos estratégicamente colocados reflejan el jardín, subrayando la importancia de las vistas hacia el exterior y creando un ambiente cálido de hogar.

El exterior promete grandes veladas. 

El jardín, con un suelo de losas de hormigón, se nutre de una abundante vegetación autóctona que desdibuja el recorrido. Lo han amueblado con mobiliario de Kettal combinando diferentes tonalidades y materiales, generando un ambiente armonioso.

Aquí se puede disfrutar de diferentes actividades: comer al aire libre, relajarse en una zona chill-out con una copa, o descansar en las tumbonas frente a la piscina. La vegetación permite zonificar los distintos espacios, creando áreas específicas para cada uso. 

Las habitaciones son cálidas y cuentan con todo el mobiliario diseñado a medida por el estudio de Sandra Tarruella Interioristas. Destacan las fotografías de Elena López Lamadrid, que están vinculadas al concepto del jardín, aportando una conexión visual y temática con el entorno exterior.

Dos proyectos y una misma filosofía. Dos rincones geográficos muy diferentes y, sin embargo, unidos por el interiorismo. Líneas puras, materiales naturales y colores que recuerdan a los que encontramos en la naturaleza. Buenas ideas y una excelente ejecución.