Conocimos a Mary-Kate y Ashley, las gemelas Olsen, en la serie Padres Forzosos cuando eran niñas y poco a poco las vimos crecer en numerosas películas. Tras una vida bajo la atenta mirada de los focos, las gemelas y hermanas mayores de Elisabeth Olsen, en 2004 decidieron alejarse de la interpretación y adentrarse en el mundo de la moda. Así crearon en 2006 The Row, una firma de lujo que se distingue del resto de marcas creadas por celebrities. Las firmas de famosos se caracterizan por tener llamativos logos, el nombre de la personalidad y su rostro para promocionarla. Pero las Olsen se revelaron. Creían que era posible hacer moda de lujo en el que lo importante no fueran ellas, sino la ropa. Por eso, su nombre y sus caras no aparecen por ningún lado en la promoción de la firma.
Además, las marcas de famosos intentan llegar a mucho más público, especialmente joven, a través de precios muy asequibles. Pero esa idea no encajaba con la visión de The Row. Las Olsen crearon una marca centrada en la calidad y el lujo de las prendas, concebidas como piezas únicas y necesarias para el fondo de armario de los más pudientes. Y para ese fondo de armario crearon piezas sencillas, minimalistas y discretas, sin nada de estampados, coloridos ni elementos que distraigan la mirada. Para celebrar los 15 años de la marca, siguiendo su idea de no ser ellas el centro de atención, las gemelas Olsen han concedido una entrevista muy peculiar. Con Gigi Hadid en portada, se trata más bien de una conversación con diferentes famosos en las que ellas son lo menos importante.
"Somos dos mujeres muy pequeñas que coleccionan costura. Amamos el diseño, pero no encontrábamos prendas que pudiéramos llevar porque pensábamos que eran ellas las que nos llevaban a nosotras. Ese fue un pensamiento que tuvimos al comenzar la marca. Cada temporada, te haces algo más pequeña. Aprendes algo nuevo. Te empujas a ti misma para explorar en lo profundo y ser más sabia. Creo que siempre vamos a evolucionar junto a nuestros clientes y con la marca, porque estamos constantemente aprendiendo y el mundo está en un cambio continuo. No perseguimos nada, solo somos honestas respecto a quiénes somos y dónde está nuestra firma", explica en la entrevista Ashley Olsen.
Y, de igual manera, sus tiendas son auténticas joyas que parecen más oasis de paz que tiendas de ropa, en las que, por supuesto, no aparece su nombre ni su imagen por ningún lado. Ubicadas en Londres, Los Angeles y Nueva York, debes buscarlas para encontrarlas, ya que si pasas por delante sin saberlo, posiblemente ni te des cuenta de que es una tienda de ropa. Se trata de templos en los que los amantes de la arquitectura se enamorarán del espacio y de la moda, adornados con obras de arte de valor incalculable. Sus tiendas demuestran que, en la era en la que compramos compulsivamente por internet, el lujo es la experiencia de ir a una tienda como estas.
"Me encanta el que si entras en una de sus tiendas, no sabes necesariamente que ellas están involucradas, pero de lo que no te cabe duda es que sus diseños son de la mayor calidad y cuentan con un diseño estupendo", asegura en la entrevista Gigi Hadid.