Son muchos los motivos que tenemos para permanecer optimistas, pero a veces necesitamos que nos los recuerden. Le Corbusier, Ricardo Legorreta o Elsie de Wolfe se emplearon a fondo para convertir su pasión en su trabajo. Por el camino, nos dejaron frases que se convirtieron en declaraciones de intenciones y que hoy nos ayudan a ver el mundo un poco menos borroso. A su lado pasamos esta primera semana de cuarentena.