Tendencias en iluminación 2025: sistemas más inteligentes y sostenibles para mejorar tu hogar y bienestar

La luz siempre ha sido un elemento fundamental en la arquitectura y el diseño de interiores, pero en 2025, su rol trasciende lo funcional para convertirse en un factor decisivo del bienestar y la sostenibilidad. Este año marca un punto de inflexión en el que las tendencias de iluminación reflejan un equilibrio entre tecnología, estética y humanismo. “Nosotros creemos que la luz influye en la estética, en el ambiente y en el estado de ánimo. Pero es que además, ha progresado y ha dejado de ser un elemento funcional para convertirse en parte integral del diseño, y sobre todo en cómo vives los espacios”. Quien así se expresa es Juan Luís Medina, fundador y director creativo del estudio MIL Studios, que tiene claro que 2025 se centrará en la fusión entre la eficiencia energética, el diseño innovador y todos los sistemas de iluminación. “Los LEDs inteligentes que se personalizan o que puedes programar, definirán el paisaje de la nueva iluminación para el hogar. Y sobre todo, nos va a ofrecer ambientes mucho más versátiles y sostenibles para para este hogar contemporáneo”.

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Matilda, de Faro Lab, es una lámpara con un diseño minimalista y geométrico. Su pantalla giratoria y su regulación en altura, ofrece múltiples posibilidades de orientación de la luz.

En busca del bienestar

Por su parte Iván Meana, director de proyectos de Faro Barcelona, destaca que el diseño centrado en el bienestar (“Human-Centric Lighting”) será una de las claves del año. “Una de las tendencias más relevantes para 2025 será poner a los usuarios de la iluminación en el centro y pensar en ellos desde la fase inicial del diseño de iluminación. En este ámbito, debemos tener en cuenta, por un lado, la iluminación circadiana, es decir, diseños que simulan el ritmo natural de la luz solar, promoviendo la salud física y mental. Pero también el control y la conectividad, que están evolucionando para adaptarse de manera inteligente y dinámica a las necesidades cambiantes de los usuarios, ofreciendo soluciones personalizadas que optimizan la comodidad, la eficiencia energética y el bienestar en tiempo real”. En esta misma línea se muestra Medina también, pues asegura que “los sistemas domóticos sencillos e inteligentes que puedes controlar desde el móvil con un sistema de voz, también serán una tendencia al alza para 2025”.

Metal, arte y singularidad son los componentes de la nueva propuesta de Galarina, la marca fundada por el diseñador e interiorista Alex March y el metalista Juan Pavón. Galarina combina creatividad y manufactura en serie para crear piezas que revalorizan el uso del metal.

La investigación en este ámbito también subraya cómo la iluminación circadiana puede ser beneficiosa en entornos laborales, mejorando el bienestar de los empleados y fomentando una mayor concentración. Un informe de Lighting Research Center destaca que los trabajadores expuestos a luz natural o simulada experimentan una reducción del estrés y mejoras en la calidad del sueño.

Temperatura y sostenibilidad

La temperatura es un factor determinante para Medina: “Para nosotros siempre la temperatura de luz para un hogar es de 2700 para abajo hacia 1900 grados Kelvin, ideal para para crear esos ambientes cálidos, envolventes, casi dorados”. Un concepto muy relacionado con lo que Meana denomina “enfoque en eficiencia energética: diseños y sistemas que optimizan el consumo eléctrico, alineados con objetivos de sostenibilidad, así como diseños minimal y semi-invisibles: luminarias que consiguen integrarse totalmente en la arquitectura logrando casi desaparecer, destacando la luz más que el objeto”.

Estudios recientes respaldan estas tendencias: según el World Green Building Council, hasta el 25% del consumo eléctrico de los edificios podría reducirse con tecnologías de iluminación eficiente. Estos avances se suman al enfoque en el diseño emocional, que busca una conexión más profunda entre las personas y su entorno.

Lámpara Cata de Faro, un diseño de Marina Milá.

Otro aspecto relevante es el uso de fuentes de energía renovable para alimentar los sistemas de iluminación. En 2025, se espera un aumento en la implementación de soluciones solares para proyectos residenciales y comerciales, reduciendo así la huella de carbono de las instalaciones. Y el llamado por Meana “ecodiseño, esto es, que cada vez más se prioriza la incorporación de modelos y creaciones que ponen el foco en el uso de materiales reciclables, reciclados y con bajo impacto ambiental” Está claro que en 2025, la luz no solo ilumina, sino que inspira, conecta y mejora nuestra calidad de vida.