Esta escena es de sobra conocida en todos los hogares: comienza el día y el cuarto de baño pierde inmediatamente el orden mientras llevamos a cabo la rutina de prepararnos para afrontar una nueva jornada. Sin embargo, el interiorismo nos da trucos e ideas para mantener la situación bajo control. Saber sacar partido a su forma para poder aprovechar los espacios y rincones que se crean, hacerse con muebles funcionales que aporten almacenamiento y superficie de apoyo o escoger con buen ojo los materiales son algunas de las claves indispensables para que esta estancia no se convierta en un caos cada mañana.