Por qué NO decorar la pared del cabecero: 5 ideas modernas para dejarlas blancas, según Arquitectura y Diseño

Son numerosas las ideas que hemos probado hasta ahora en nuestra pared del cabecero. Hemos intentado decorar esta parte del dormitorio con diferentes cuadros, espejos e, incluso, con muebles con una finalidad práctica, como son las estanterías. No obstante, en este espacio dedicado al descanso es mejor no incorporar elementos que puedan suponer una saturación visual. Por eso, en muchas ocasiones la opción más idónea es dejar el muro completamente blanco.

Apostar por una pared del cabecero blanca, no implica que tenga que ser lisa. En anteriores números de Arquitectura y Diseño, hemos podido ver algunos dormitorios con ideas realmente sorprendentes. Molduras, arrimaderos y muebles tapizados monocromáticos son solo algunas de las opciones que nos ha ofrecido esta cabecera. La apuesta por esta tonalidad neutra te garantiza que el cuarto gane un estilo atemporal.

5 ideas para dejar la pared del cabecero blanca

Dormitorio con cabecero arrimadero — Eugeni Pons

Con arrimadero

Si quieres que la pared del cabecero gane volumen, apuesta por un arrimadero de obra. Píntalo de blanco para dar continuidad a la extensión del muro y aprovecha su repisa para incorporar detalles discretos. De este modo, le da una finalidad práctica a la verticalidad del dormitorio y prescinde de algunos muebles, como las baldas largas. En esta casa de Barcelona, proyecto del arquitecto Victor Molina, de Wit; se ha puesto unos cuadros apoyados en los laterales.

Ladrillo visto atemporal

Aquellas personas que tienen un dormitorio de estilo industrial, también pueden optar por revestir la pared de su cama de blanco. En esta corriente, es muy típico ver extensiones verticales de ladrillo visto. En el cuarto de este hogar, hecho por el arquitecto Georg Kayser, se ha apostado por pintar el muro de este color neutro, conservando la textura de su estado original. Para sumar a la esencia serena del blanco, se ha puesto un cabecero del mismo tono.

Cabecero con estante incorporado — Eugeni Pons

Opta por una hornacina

Si no cuentas con mucho espacio en el dormitorio, no hay metros que perder. Saca partido a la verticalidad del muro con elementos que sumen capacidad de almacenaje. Para ello, apuesta por una hornacina. Se trata de crear un hueco en la pared para poder colocar algunas pertenencias. En esta vivienda de Madrid, proyecto de Lorna de Santos, se ha optado por una hornacina blanca, que sigue la estética neutra del muro y rompe con su monotonía.

Dormitorio con cabecero blanco — Pere Peris

Todo en blanco

Para reforzar el tono neutro de la pared, apuesta por un cabecero blanco. Se creará un look monocromático moderno y con mucho estilo. Si optas por una pieza tapizada de tela suave, sumarás textura al muro. En este hogar de Maastricht (Países Bajos), obra del arquitecto Niels Maier, vemos que se ha escogido una pieza lisa y muy elegante. El techo da continuidad al muro, ya que está revestido por el mismo color.

Cabecero blanco con armario — Eugeni Pons

Una pared de armarios

La cama puede estar pegada a otras extensiones verticales que no sean los muros de carga. Puedes optar por colocarla al lado de unos armarios altos, que no abras con frecuencia, e improvisar una nueva pared para el cabecero. En esta vivienda de Valencia, del arquitecto Ramón Esteve, se ha apostado por enganchar la cama a unos armarios lacados en blanco. No se han puesto tiradores para no romper con la armonía del tono neutro.

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