Seguramente más de una vez te has hecho esta pregunta: ¿qué opinaría un experto en interiores sobre mi casa? Adherimos a ese sentimiento de curiosidad y consultamos con Judit Molins, profesional en el tema. Queríamos saber cuáles son los errores más frecuentes que suele encontrarse antes de comenzar a trabajar en los proyectos de sus clientes. La fundadora del Estudio de Interiorismo Judit Molins nos confiesa en qué se fija cuando visita un hogar y cuáles son las alternativas o consejos que nos da para solucionar estos errores tan comunes.

Salón con cuadros de Eme Gallery, textiles de GM Estilisme d’Interiors y cojines de Filocolore.
Eric Pamies | Proyecto de Judit Molins Interiorismo
Muy poca importancia a las cortinas
"Uno de los errores más comunes que veo en las casas es que no se le da suficiente importancia a las cortinas", nos dice la experta. "A veces, la gente ni las pone, o elige modelos que no encajan bien con el espacio, como cortinas demasiado cortas o de tejidos que no favorecen la luz natural. Es un detalle que puede cambiar por completo la sensación de una estancia", afirma.
Sobre la dimensión y longitud de las cortinas, Judit afirma que "lo ideal es que rocen el suelo o incluso arrastren un poco, sobre todo si se busca un efecto más elegante. Además, colocarlas lo más alto posible ayuda a que la habitación parezca más amplia", concluye.

Cocina a medida de nogal y mármol.
Natelee Cocks | Proyecto de The Niche Corner
No pensar en el equilibrio del espacio
"Otro fallo bastante habitual es llenar la casa de muebles y decoración sin pensar en el equilibrio del espacio", comenta Judit. "Cuando hay demasiados elementos, el ambiente se vuelve agobiante y desordenado. Al final, menos es más. No se trata de tener la casa vacía, sino de elegir bien qué piezas realmente aportan al conjunto y dejar que el espacio respire", nos dice la experta.
Y aunque el minimalismo extremo ha pasado de moda, conviene recordar que una casa debe generarnos comodidad y bienestar, tanto visual como mentalmente. Por lo tanto, la máxima de "menos es más", continúa siendo válida en algunos casos.

Salón con cuadros de Eme Gallery, textiles de GM Estilisme d’Interiors y cojines de Filocolore.
Eric Pamies | Proyecto de Judit Molins Interiorismo
Elegir colores sin tener en cuenta la iluminación
La experta nos comenta que otro de los errores más comunes es que la gente suele elegir colores sin tener en cuenta algunos aspectos clave del interiorismo en sus casas. "Veo que muchas personas escogen los colores sin tener en cuenta la luz y el tamaño de la habitación. A veces un color oscuro puede ser precioso, pero si el espacio es pequeño y no tiene mucha luz natural, lo hará ver aún más reducido", nos cuenta. "En esos casos, siempre recomiendo tonos claros o neutros que den sensación de amplitud. Si alguien quiere meter color, pero sin arriesgar demasiado, es mejor hacerlo con accesorios como cojines, alfombras o cuadros, en lugar de pintar toda una pared de un tono muy intenso", afirma.

Sofá EKO y alfombra de Christophe Delcourt, mesa de centro Trio Multilaque de Pierre Augustin Rose, sillones de Stephan Permantier, consola Trani de Stephan Permantier y espejo de Kiko Lopez.
Ilya Klimov | Proyecto de Art Bureau 1/1
Materiales sin coherencia
"Con los materiales pasa algo parecido a lo del color", nos dice Judit. "La mezcla sin control es un error común: madera, mármol, metal, cristal... Si no hay una armonía entre ellos, la casa puede terminar pareciendo un caos. Lo mejor es elegir una base y, a partir de ahí, sumar contrastes con criterio, sin sobrecargar", recomienda la interiorista.

Textiles de GM Estilisme d’Interiors.
Eric Pamies | Proyecto de Judit Molins Interiorismo
Iluminación descuidada
"En cuanto a la iluminación, muchas veces se descuida o se limita a una sola lámpara en el techo, pensando que es suficiente", nos dice Judit. Sin embargo, "la realidad es que cada espacio necesita distintos puntos de luz. Una luz general ayuda a iluminar todo, pero si no se complementa con luz puntual (como lámparas de lectura o focos en la cocina) y decorativa (apliques, tiras LED, lámparas auxiliares), la casa puede sentirse fría o poco acogedora", afirma la experta.
Respecto a la temperatura de las bombillas, Judit nos comenta que es crucial elegir sabiamente. "Una luz muy fría en el salón puede hacer que parezca una oficina, mientras que una luz cálida en la cocina puede restar visibilidad. La clave está en encontrar el equilibrio según el uso de cada espacio", aconseja.

La interiorista Judit Molins decorando con plantas y flores.
Eric Pamies | Proyecto de Judit Molins Interiorismo
Pequeños detalles que marcan la diferencia
"Por último, si alguien quiere mejorar su casa sin hacer grandes cambios, hay pequeños detalles que pueden marcar una gran diferencia", nos dice Judit. "Los textiles, por ejemplo, tienen un impacto enorme. Cambiar cojines, cortinas o alfombras es una forma rápida y sencilla de renovar una estancia sin necesidad de gastar mucho", afirma.
Finalmente, la experta nos aconseja incluir plantas y árboles naturales para transformar el ambiente: "Aportan frescura, vida y hacen que los espacios se sientan más acogedores y equilibrados. A veces, solo con añadir una planta bien colocada en un rincón, la decoración sube de nivel", concluye la experta.