En un momento en el que la casa se abre y la relación entre las estancias es fluida, solo hay que pensar en la cocina abierta al salón o al comedor, pero también en los dormitorios que integran el baño, la forma de comunicar o separar los espacios influirá tanto en sus (buenas) relaciones como en la vida de sus habitantes. Cuando se trata de separar sin obras, la madera se convierte en una aliada perfecta que vincula la casa con la naturaleza, logrando con esta unión un plus de calidez.
En sus diferentes versiones (panelada, lamas, alistonada o con palillería) y formas de colocación (horizontal, vertical, ciega, abierta…) no solo conecta las estancias, sino que también creapatrones únicos, llenos de personalidad. Además, abandona su imagen rústica a favor de una estética más minimalista y actual, con maderas más claras, más neutras, que permiten ganar en sofisticación e integrarse mejor en viviendas actuales, sin perder en ningún caso la sensación de estar en casa. Estas 9 soluciones son una muestra de sus posibilidades como elemento divisorio.