Las barreras entre las estancias llevan tiempo desapareciendo de las casas actuales y las tendencias de decoración siguen apostando por un gran espacio común que aglutine salón, cocina y comedor. Un lugar abierto y dialogante, donde estos comedores integrados en el resto de la casa, logren un nuevo papel protagonista, híbrido y con más posibilidades.

Así, al tirar los tabiques, adquiere más funciones, además de mesa, es lugar de trabajo, encimera de cocina, rincón para tomar un café o, incluso, comedor exterior. Esto no significa que pierdan su personalidad, ya que, aunque se fusionan (también decorativamente) con el resto de la vivienda, son capaces de mantener su propia identidad. Para conseguirlo, apuestan por la mezcla como una forma de simplicidad y sello personal. Estas ocho propuestas son todo un ejemplo. 

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Juntos, pero no revueltos
Vitra

Juntos, pero no revueltos

A veces se puede compartir espacio, pero no conquistar estancias que no te pertenecen. Esto es lo que ocurre en esta propuesta de Vitra, donde el comedor está comunicado visualmente con la cocina, pero mantiene sus propios límites y su propia personalidad. 

Conectado con el jardín
Jordi Miralles

Conectado con el jardín

Por un lado, este comedor se delimita de la cocina mediante un tabique a media altura. Mientras que por otro, se abre al exterior, en este caso al patio interior, mediante un tabique corredero, convirtiéndose durante los meses veraniegos en el comedor de dentro y fuera. 

Tres en uno
Lidia Molina

Tres en uno

Esta propuesta de la interiorista Lidia Molina crea una zona de día diáfana y perfecta para compartir al integrar cocina, comedor y salón. Una forma de ganar amplitud y favorecer la vida familiar y social. Unificados por el pavimento de madera, los tres comparten estilo, pero mantienen sus propias señas de identidad.

Como una isla
María Algara

Como una isla

Este 'efecto isla' se logra tanto por su ubicación, en el centro de la cocina y a continuación del salón, como por sus materiales. La mesa y las sillas de madera destacan en esa caja blanca. Eso sí, el comedor no está solo, ya que  los muebles de la cocina también incorporan madera en sus frentes. 

Integrado en la cocina
Jordi Canosa Estilismo: Mar Gausachs Interiorismo: Pia Capdevila Interiorismo

Integrado en la cocina

Más que abierto a la cocina, en esta propuesta de Pia Capdevila el comedor se adosa a la isla de cocina, ejerciendo las funciones de office. Para mantener su propia identidad, se ha elegido una mesa de madera, en contraste con el mobiliario blanco, y se ha situado más bajo que la encimera. 

En buena sintonía
Matthew Millman

En buena sintonía

Tanto con el exterior como con el interior. La clave de esta armonía se encuentra en la unidad estética que se respira. Aquí  la madera, presente también en la carpintería de las ventanas, hace de nexo de unión. 

Entre la cocina y el jardín
Neptune

Entre la cocina y el jardín

En esta propuesta el comedor ejerce (casi) como elemento barrera entre la cocina y el exterior. De esta manera, están integrados y forman parte de un todo, pero dentro de sus límites. La alfombra también ayuda a delimitar y evita el 'juntos y revueltos'.

En modo office
Northdeco

En modo office

En esta propuesta de Northdeco, con barra alta para desayunos y comidas informales, el comedor está tan integrado en la cocina que pierde su carácter solemne y adquiere las funciones de office. Así, es perfecto para cenas con amigos, mesa de trabajo, espacio para jugar en familia...