La vida outdoor en verano no solo es playa, río o piscina, también está formado por esas comidas de verano que se alargan en sobremesas inolvidables. En porches, terrazas o jardines, los que disponen de un comedor exterior (a la sombra) son los verdaderos afortunados de la temporada. Hemos seleccionado 15 comedores al libre que nos inspiran y nos dan ganas de que lleguen ya las vacaciones. Muchas de sus ideas además se pueden llevar también al interior de tu casa.
¿De cuánto espacio disponibles?
El comedor exterior no está atado a los mismos cánones estéticos que el interior. Por eso, el primer consejo es: "Siéntete muy libre para decorar este espacio". En realidad, una mesa y algunas sillas o bancos son suficientes. Si solo sois dos, bastan 80 cm para colocar una mesita tipo velador y un par de sillas de respaldo bajo. Si tu familia es reducida, en una mesa de 120 x 80 cm podréis comer cuatro personas cómodamente. Más práctica aún si es extensible. Pero como las comidas con amigos son la salsa del verano, igual prefieres una gran mesa. En una rectangular de 180 cm de largo caben ocho personas; en una redonda de 180 cm de diámetro, hasta doce.
Materiales que resisten
Los muebles de madera (teca y acacia) son un clásico, pero necesitan una aplicación de aceite especial al inicio y final de la temporada para hidratarlos. El aluminio es muy práctico si el comedor es de quita y pon. El hierro en mesas y sillas es duradero y añade mucho encanto. Las fibras vegetales son ligeras y agradables al tacto, pero la humedad provoca daños. Las sintéticas y las resinas son muy duraderas.