En un paisaje rural, en el pequeño pueblo checo de Rybí, hemos encontrado esta casa firmada por el estudio de arquitectura Klarch. La construcción se ubica en un solar de grandes dimensiones delimitado por el borde de la carretera de acceso, un arroyo y el vallado de la propiedad vecina. En esta estampa de postal con vistas a los bosques y a las casas desperdigadas por los alrededores, se encuentra esta propiedad dividida en dos casas: una para una familia de cuatro y otra separada para los abuelos. Ambas han sido ideadas por el estudio de arquitectura según dos peticiones de los clientes: que fueran de madera y sostenibles, es decir, fáciles de construir y rentables en funcionamiento.