Si echamos la vista atrás podemos afirmar una cosa: 2023 ha sido el año del color. Como base de nuevos estilos, como clave para resucitar tendencias aparentemente olvidadas o como lienzo para dejar flotar la imaginación. Todo el despliegue cromático lo hemos encontrado distribuido en tres grandes puntos.
Partimos de la base de los blancos, beiges y colores nude y el imparable eco que han generado con la vuelta a lo nórdico y la transformación de lo orgánico. En estilos en los que la textura ha ido de la mano del color para descubrir nuevos límites.
Continuamos por la inclinación hacia la naturaleza para crear estancias y el imponente protagonismo del verde, el azul y los colores tierra. Y finalizamos con esa vuelta a los ochenta, al arte pop up y a la vivacidad del color que ha traído de nuevo la alegría de colores como el naranja y el amarillo. Adéntrate en lo último en decoración y tiñe tu casa con los colores de moda de este invierno.