No han podido esperar a comprarse una casa juntos. La química entre Harry Styles y Olivia Wilde es tan grande que la actriz y directora se ha ido a vivir a la casa temporal de Los Angeles en la que reside el cantante y actor. 

Olivia Wilde se ha mudado a esta casa, que es la que 'ocupaba' Harry Styles durante el rodaje de la película Don't Worry Darling. La pareja se conoció precisamente en este film del que ella es la directora y él uno de los intérpretes. 

El nuevo escenario de la historia de amor de esta pareja es un inmueble de casi 600 mde algo más de un millón de euros. Para dos estrellas como ellos se trata una casa sencilla, aunque, eso sí, está llena de comodidades: grandes ventanales que permiten la entrada de la luz natural en todas las estancias, habitaciones pequeñas pero llenas de encanto y una zona exterior con piscina incluida para celebrar la llegada del verano.