Bradley Cooper amplía sus propiedades. El actor, conocido por sus papeles en las exitosas Resacón en Las Vegas, Ha nacido una estrella o Guardianes de la galaxia, ha pasado la mayor parte del último año en Nueva York, donde se refugió en la cuarentena con su madre y su hija, fruto de su matrimonio de cuatro años con su expareja, la modelo Irina Shayk. Ahora, ha sellado un trato para adquirir por 4'8 millones de dólares una nueva casa en la comunidad costera Pacific Palisades. Así se suma a sus otras propiedades en Los Angeles, que incluyen un bungalow contemporáneo en Venice que compró a finales de 2004 por casi 1'2 millones de dólares y una residencia contemporánea en el codiciado vecindario Rustic Canyon de Pacific Palisades - a apenas un kilómetro de distancia de la casa que acaba de adquirir- que compró en 2009 por 4'7 millones de dólares.

En Nueva York, su estancia tuvo que ser más que cómoda en la propiedad que compró en 2018 por 13'5 millones de dólares. Se trata de una casa adosada de ladrillo rojo de cinco pisos totalmente renovada en una zona privilegiada del West Village. No se conoce mucho de la casa, ya que el acuerdo se cerró fuera del mercado. La documentación de cuando estaba disponible para alquilar en 2017 por 50000 dólares al mes muestra que tiene cuatro habitaciones, cuatro baños, un sótano con sala multimedia, una suite principal de piso completo con dos grandes vestidores, una cocina gourmet y un salón abierto que da a un jardín de quince metros de profundidad.