La tendencia coastal grandma que tiene obsesionado a internet cobra más sentido que nunca considerando el estrés tecnológico al que estamos sometidos en las ciudades. Los jóvenes han comenzado a ver las películas en las que Diane Keaton y Meryl Streep interpretan a mujeres que viven relajadamente en la playa y se han dado cuenta de que así es como quieren vivir. Los entendemos perfectamente. Retirados, tranquilos y compartiendo comidas caseras con amigos, tal y como haría una costal grandma. Así, este estilo de vida (y actitud) en el que poder practicar hobbies al aire libre, se aplica también a la vivienda, con un interiorismo que encuentra el equilibrio perfecto entre rústico y minimalista, decorando casas con bonitas vistas al mar. He aquí las diez casas a las que nos gustaría mudarnos para empezar nuestra etapa de "abuela costera": 

 

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Cocina comedor abierto al exterior

Reunirse en el comedor

En esta casa los grandes ventanales, con apertura máxima y perfilería mínima, nos muestran –desde el salón, el comedor, el dormitorio principal, el baño –sucesivos encuadres de las arenas soleadas y el mar de Menorca. La mirada se pasea plácidamente en los interiores blancos, abundantes en madera, y se proyecta eufóricamente hacia la playa dorada y el mar tornasolado. Sigue leyendo aquí

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Disfrutar del mar en todo momento

El proyecto en la Costa Brava de los arquitectos Josep Fuses y Joan Maria Viader ha dado mayor importancia a la contemplación del paisaje que a las bondades de la orientación. El ala correspondiente al salón, el comedor y la cocina goza de la visión directa del mar abierto. De este modo, una arquitectura imponente se alía con la austeridad material y una esmerada selección de mobiliario y obras de arte para crear una atmósfera refinada y de gran confort. Sigue leyendo aqui

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Color blanco y madera para el relax

Esta segunda residencia en la Costa Brava de unos 300 metros cuadrados que carece de tapicerías y de cortinas llama al relax, a tumbarse en el sofá y dedicar el fin de semana a la lectura. La iluminación ayuda: apenas hay luz cenital y sí profusión de apliques. Se buscó una casa muy blanca y muy mediterránea, con los mismos tonos de luz en el interior y en el exterior y con un uso muy discreto de tapicerías y muebles.  Sigue leyendo aquí

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RAFAEL GAMO

Una mesa lo suficientemente grande para reunirlos a todos

Esta vivienda en Mexico, hecha para disfrutar del aire libre, se ha ejecutado partiendo de materiales locales, sencillos y duraderos. La selección mineral de materiales fue concebida para lograr su buen envejecimiento y al mismo tiempo minimizar el mantenimiento de la casa. Tejidos naturales como el mimbre y las vasijas de cerámica son elementos decorativos que se usan en el interior y reflejan el reconocimiento hacia el trabajo artesanal. Sigue leyendo aquí

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Casa Es Garbi

Cocinar mirando el mar

Bordeando el litoral mediterráneo, el Camí de Ronda es una antigua ruta que conecta los pueblos y playas de la Costa Brava (Girona). Este camino pasa frente al complejo de viviendas donde se esconde esta casa donde el salón y cocina conectados entre sí y un antiguo desván abierto componen una gran área común. Las vigas de madera y el suelo hidráulico mantienen la personalidad vernácula de la casa y la distribución permite cocinar mientras se disfruta de las vistas al mar. Sigue leyendo aquí

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J. Rodríguez

Abuela cantábrica

Para dotar de privacidad a la casa y preservar las vistas del mar Cantábrico, los arquitectos forzaron el emplazamiento de la vivienda al borde del acantilado, situando el acceso en la parte posterior. El trabajo de interiorismo compone una imagen unitaria y coherente de la casa a través de la repetición de determinados elementos y con un mobiliario preciso y sobrio con la misma carta de colores: blanco, tonalidades de gris, toques de negro y elementos de madera que transmitan sensación de confort y calidez. Sigue leyendo aquí

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Aires vintage

El responsable del diseño interior ha reacondicionado la casa, originaria de los años 70, convirtiéndola en un hogar cálido, orgánico y modernista, con vista al Océano Pacífico. Los muebles son una combinación de diseños personalizados, hallazgos vintage y piezas escultóricas, todo ello bajo una paleta cromática inspirada en el paisaje, donde se impone los tonos crudos y naturales propios de la playa y de las rocas, con pinceladas de azul, en clara alusión al océano. Sigue leyendo aquí

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Vegetación brasileña

El espíritu de esta casa  en la costa de São Paulo se alimenta de la exuberante belleza del entorno natural: kilómetros de playa de arena dorada y aguas turquesas, vegetación tropical, sol y buena temperatura todo el año. Las maderas tropicales, las alfombras de yute, el pavimento cerámico de color arena y las piezas de artesanía crean un ambiente de gran naturalidad y todos los materiales aportan sensualidad y calidez a tono con el escenario tropical. Sigue leyendo aquí

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Marbella como los Hamptons españoles

Al visitante que abandona esta vivienda en Marbella (no se nos ocurre mejor localización para que una coastal grandma española se retire) después de una jornada de ociosidad al lado de amigos y de zambullidas en las ondas turquesa de la piscina aérea, le cuesta despedirse de estas visiones entre domésticas y oníricas, cambiantes, vanguardistas y a la vez ancladas en la vieja pasión del Mediterráneo por el mar, la luz y el sol. Sigue leyendo aquí

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Casa CostadelaCalma 27

Echar el día en la terraza

La buganvilla recorre algunos de los rincones con más encanto, ideales para disfrutar de los atardeceres en la isla. Lugares sombreados con vistas al mar donde el tiempo se detiene. Una mesa para varios comensales o un mirador para dos. Se aprovechan todos los rincones posibles para crear rincones encantadores para disfrutar de las vistas. Sigue leyendo aquí

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