Barcelona es una de las ciudades más visitadas de Europa. En 2022, más de 9 millones de turistas decidieron pasar unos días en la capital catalana, disfrutando de su clima, sus paisajes y su arquitectura. Entre los monumentos más visitados de la ciudad, destacan la Sagrada Família, la Casa Batlló o el Museo Picasso.

Además de las ofertas culturales, los turistas optan por visitar los paisajes de Barcelona, disfrutando de la playa y de las zonas verdes que ofrece la ciudad. El Parc de la Ciutadella y el Parc del Laberint d'Horta son algunas de las zonas más concurridas de la ciudad. Sin embargo, hay un parque que destaca entre todos los demás y que también se ha llevado el premio como el más buscado de 2023, el Park Güell. 

 

 

Vistas a Barcelona Park Güell

El Park Güell, un diseño arquitectónico completo con la ciudad a sus pies

El Park Güell fue diseñado como un espacio que buscaba elevar la categoría de la ciudad con el modernismo que iba cogiendo cada vez más forma. Las exposiciones universales que se celebraron a finales del siglo XIX y principios del XX dejaron ver el proceso de modernización que estaban llevando a cabo las principales ciudades europeas.

Barcelona no podía quedarse atrás y fue entonces cuando el empresario Eusebi Güell encargó a Antoni Gaudí la construcción de un parque que destacara entre los demás, tanto en sus formas como en su diseño.

 

Gaudí se encontraba en su época naturalista en la primera década del siglo XX, cuando ideó esta obra, lo que influyó ampliamente en sus características tan originales. El recinto sobresale por sus formas inspiradas en la naturaleza y por sus piezas tan coloridas. Esto se puede observar en los diseños de lagartijas que se encuentran por todo el lugar o en el nombre de algunos espacios, como la reconocida escalinata del dragón.  

El parque más famoso de Gaudí se encuentra en un punto estratégico de la ciudad, en la sierra de Collserola. Es precisamente esta altitud lo que permite una vista panorámica de toda la ciudad.

La construcción del Park Güell finalizó en 1914, pero no se inauguró como parque público hasta 1926. En 1984 se le otorgó el título de Patrimonio de la Humanidad. Desde entonces, ha acogido a millones de turistas y locales que buscan conocer con más profundidad la arquitectura de Antoni Gaudí. 

Escalinata del dragón park güell

Antoni Gaudí, más allá de su obra

El Modernismo catalán fue un movimiento cultural de principios del siglo XX que buscaba transformar la ciudad de Barcelona y convertirla en un lugar más en consonancia con el resto de Europa.

Fueron tres los arquitectos más destacados de este movimiento: Lluís Domènech i Montaner, Josep Puig i Cadafalchy Antoni Gaudí. Este último fue el mayor impulsor del modernismo en la ciudad y fue el creador de obras tan reconocidas como la Sagrada Família, la Casa Batlló o el Parl Güell. 

El biógrafo Josep Maria Tarragona relata en su obra Gaudí, el constructor de la Sagrada Familia algunos de los entresijos de la vida del arquitecto catalán. Por ejemplo, relata que no fue el mejor estudiante y que incluso llegó a suspender alguna asignatura durante la carrera.

En el ámbito emocional, nos cuenta que no tuvo demasiado éxito y que no pudo cumplir su deseo de formar una familia. Durante su juventud, se juntó con las clases más acomodadas de la ciudad y llevó a cabo una vida de excesos, que llegó a su fin cuando descubrió su faceta más religiosa.

El encargo de la basílica de la Sagrada Familia supuso un antes y un después en su vida profesional y lo aceptó a modo de reto personal. Además de sus obras más reconocidas, Gaudí también diseñó muebles y luces que transmiten su esencia y que ensalzan aún más la figura del arquitecto. 

 

 

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