Finalista de los premios FAD 2018, la casa Plywood se ubica en una calle de casas adosadas en un tranquilo barrio de Palma de Mallorca. La necesidad de ampliar el edificio de planta baja con un nuevo piso por encima, mientras se mantiene su estructura base, exigió por parte del estudio SMS Arquitectos una solución liviana para no sobrecargar las paredes de piedra originales.
El proyecto se abordó desde dos líneas de investigación paralelas. Por un lado, se exploró la posibilidad de la fabricación local de piezas de madera contrachapada con un Router CNC y, por otro lado, se hizo un estudio profundo de las artesanías que aún perviven en la isla. La primera se llevó a cabo desarrollando un sistema de madera contrachapada prefabricada. A partir de tablas de álamo de 244x122cm, la estructura da la oportunidad de investigar y probar una estructura que utiliza el propio lenguaje de su proceso de fabricación. La construcción se muestra en bruto, desnuda, y decora por sí misma el interior. La falta de acabados muestra la geometría del techo, lo cual conecta con la ornamentación arabesca del casco antiguo de Palma.
En paralelo, se incorporan materiales y artesanía local con diferentes grados de industrialización. Junto a Huguet, fabricante de baldosas de hormigón durante décadas en Mallorca, se diseñaron baldosas lisas para diversos puntos del interior de la casa. Para la fachada y la piscina, se dispusieron azulejos de terracota de Miquel Soler, fabricante de Felanitx.
El proyecto establece varias “zonas atmosféricas” dentro de la casa. Hay habitaciones con luz difusa, con luz de la mañana, orientadas al noreste y orientadas al suroeste. Habitaciones con vistas a un patio interior y habitaciones con sol de tarde y vistas al cercano castillo. Algunos espacios tienen una masa térmica más fresca en verano, mientras que otros se calientan fácilmente en invierno, invitando a la migración estacional dentro del hogar. Solo los cuartos de baño y la cocina tienen un uso fijo.