Cuando se construye en un lugar de clima inhóspito en el que además es difícil proveerse de materiales y mano de obra cualificada, la prefabricación es sin duda la mejor alternativa. Gracias a ella Sergio Araneda, del estudio SAA arquitectura + territorio, logró dar respuesta a la petición del cliente de crear una casa junto al lago General Carrera, en la región chilena de Aysen, que respondiera a las características propias de las construcciones patagónicas. La estructura soportante de pilares, vigas y marcos de ventanas se realizó en acero, mientras que para la envolvente del suelo, muros y techo se utilizaron paneles SIP. Para las terminaciones se trabajó con madera nativa con acabados propios de maestros y sus técnicas de carpinterías local. En total, cinco meses de trabajo para levantar esta casa en armonía con uno de los lugares más fascinantes del planeta.