Playa Tamarindo es una de las zonas más turísticas de Costa Rica, pero también un lugar vulnerable a los riesgos de la sucesión de períodos de sequías e inundaciones que cada vez son más frecuentes en las zonas tropicales a causa del cambio climático. Para los habitantes de la zona, el uso sostenible de los recursos se está convirtiendo cada vez más en una prioridad y no una simple opción. Es lo que ha hecho Rodolfo Tinoco, del estudio LSD Architects (acrónimo de Laboratory Sustaining Design, laboratorio de diseño sostenible), en el diseño de su propia casa. Elevada sobre pilares para reducir su huella en el terreno y a la vez evitar los efectos de las inundaciones, la vivienda dispone de techo solar fotovoltaico, sistema de captación del agua de lluvia y de tratamiento y reutilización de aguas grises y un huerto vertical para depender lo menos posible de la conexión a la red y materializar de forma coherente una arquitectura saludable.