Diseño, elegancia, espacios grandes rodeados de verdor y mucha luz. Es lo que le pidió un joven matrimonio al decorador y diseñador alicantino Toni Espuch, al frente de las tiendas Azul Tierra de Alicante y Barcelona, para su nueva residencia en la Costa Blanca. Y es exactamente lo que obtuvieron: un hogar cálido en el que las antiguas alfombras persas y el hierro natural de los revestimientos de la chimenea, la escalera y algunas verticales rompen la frialdad de las paredes de hormigón.
"Incluimos pocas piezas buscando el volumen. El jardín se plantó nuevo, de un tamaño considerable, pues la vegetación es un contraste de la belleza, de lo natural", dice Toni Espuch. El dueño de la casa quería madera, y la dueña se decantaba por los metales. Al final lo armonizaron todo a lo largo de tres plantas. La escalera separa las estancias y sirve de hilo conductor en los ambientes interiores. Los grandes ventanales que dan al jardín invitan a la vegetación a integrarse dentro, y, junto con los techos altos, absorben a raudales la estimulante luz mediterránea.