El Jardín Romántico de Sanderumgaard fue creado en la isla danesa de Fyn por el maestro paisajista Johan Bülow entre 1793 y 1828. La huella de su autor puede rastrearse no solo en la disposición del espacio, con su red de canales navegables en barca salpicada de islotes, sino también en la serie de pequeños pabellones que contenían cada uno una manifestación de cultura: un pensamiento, un poema, una pintura. La intención de Bülow era estimular la reflexión y la conexión entre hombre y naturaleza.

El espacio serviría de escenario tanto de reuniones informales como de eventos como conciertos, clases de jardinería y celebraciones privadas.

Cuando propusieron al estudio SquareOne diseñar un nuevo pabellón para este idílico entorno, los arquitectos daneses pensaron en algo completamente opuesto a la idea de recogimiento individual que expresaban los otros pabellones: un espacio no oculto, sino expuesto; no excluyente, sino abierto a diversas actividades; no un contenedor de cultura, sino un arco de acceso a la naturaleza. "En lugar de continuar por el camino de Bülow y crear una versión moderna de sus solitarios 'bastiones' de cultura, fuimos en la dirección opuesta: imaginar un pabellón que fuera un himno a la naturaleza, solo que esta vez como expresión de una experiencia colectiva antes que individual".

La propuesta de SquareOne es una actualización contemporánea del romanticismo que inspiró el diseño original del jardín Sanderumgaard.

El diseño plantea una galería circular alrededor de un pequeño patio con elementos paisajísticos nórdicos y japoneses: musgo, rocas y un cerezo. La construcción se remata con un techo a dos aguas asimétrico, e incluye una "habitación poética" acristalada donde los visitantes pueden relajarse tomando una taza de té, leyendo un libro y calentándose frente a la chimenea. Abierta y accesible por ambos lados, la galería ofrece espacio para todo tipo de eventos, desde reuniones informales, conciertos y clases de jardinería hasta celebraciones más formales como bodas.

El Jardín Romántico de Sanderumgaard está conformado por una red de canales navegables en barca salpicada de islotes con pabellones.

Para los autores del proyecto, que actualmente se encuentra en fase de micromecenazgo para hacerlo realidad, "el pabellón debería ser lo suficientemente grande y adecuado para estimular la interacción de las personas, pero también debería invocar un sentido de modestia y dignidad que uniera a la gente en la contemplación de algo más grande: la propia naturaleza".

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