Y como nada es perfecto, el mobiliario a medida también tiene su punto débil. Si estamos pensando en instalar un mueble a medida en casa, conviene tener en cuenta que su fabricación requiere un tiempo, aunque éste dependerá mucho del diseño en cuestión y de los profesionales involucrados. Los plazos oscilan entre los 15 y los 30 días, aunque hay que tener en cuenta que los proyectos muy complejos pueden tardar algo más, por lo que siempre conviene prever con tiempo este tipo de encargos. Así que, dependerá de la disponibilidad del industrial que lo fabrique y de la complejidad del diseño.
Además del handicap del tiempo, por norma general este tipo de muebles a medida suelen ser más caros que los muebles modulares o estándar. Hay varias maneras para adaptarse a las necesidades y presupuesto de cada cliente. Una de ellas es simplificando el diseño y ensamblaje de la pieza. Otra, con la propia elección del material. Está claro que no es lo mismo hacer un mueble en madera de roble maciza que en una madera plastificada.
Para un mueble a medida, es recomendable solicitar una media de tres presupuestos, para poder comparar. El precio medio de una estantería de melamina de 30 mm de grosor, en color blanco, de 30 cm de fondo, sin trasera y con divisiones verticales y horizontales, rondaría los 150 euros cada metro.