La magia del agua es lo que inspiró al estudio afincado en Valencia Masquespacio a la hora de diseñar MO, una espectacular pastelería-bar en la ciudad de Al Khobar, Arabia Saudita, y que se ha hecho con uno de los premios Restaurant & Bar Design Awards 2022. Por un lado, el espacio bebe de la relación entre el agua y el proceso de la pastelería mientras que, por otro, también refleja la capacidad del agua de modificar la realidad. El resultado es un espacio casi futurista con acabados metálicos y que parece alejarse de lo sólido gracias a un diseño atrevido y que puede cambiar casi con cada mirada.
Según explican desde el estudio Masquespacio, ubicado en Valencia, el proyecto fue un reto casi desde el principio cuando los clientes, Omar y Asim de RightGrain, una compañía especializada en experiencias, dejaron claro que buscaban huir de lo tradicional. "El primer punto a destacar de las conversaciones iniciales con MO era que su atracción principal eran los pasteles, presentados como si fueran joyas con sabores auténticos e innovadores. Por esta razón, desarrollamos un concepto basado en el agua que crea magia y vida, a su vez de ser la base de la pastelería", señala Christophe Penasse, co-fundador de Masquespacio.
Así, el espacio fue dividido en tres partes que representan fases del proceso de crear un pastel y un café. El "estado líquido", cuando la masa está mezclada con el agua, se refleja en la zona que sirve de conexión entre las diferentes partes del local. En la barra se ha recreado una cascada de agua gigantesca que hace resaltar los productos en venta que se encuentran en ella. "La cascada fue creada arenando los tubos para crear la ilusión que genera la forma del agua", señalan desde el estudio.
Enfrente de la barra se encuentra el "estado sólido" o área "hielo" en la que unas luminarias enormes representan el hielo como atracción principal. A su lado, unas burbujas gigantes muestran el "estado gaseoso" que representa el momento en el que el pastel es cocido en el horno. En cuanto al mobiliario, todas las butacas han sido diseñadas por el estudio: desde sillas bajas tipo lounge y mesas compartidas hasta taburetes y rincones semiprivados para parejas.
En el local se ha apostado por una paleta de color gris y blanco que encaja a la perfección con los metalizados para las mesas y telas "con el fin de generar reflejos que recrean la distorsión que podría ser hecha por el agua". La iluminación es, además, totalmente modificable gracias a un sistema RGB que puede adaptar el espacio a distintos estados de ánimo. Otra de sus finalidades es crear reflejos gracias a las telas, mesas y esferas cromadas. Por último, en el techo reina un enorme espejo a 10 metros del suelo que representa una puerta a otro mundo. "Un reflejo de la realidad y un portal al surrealismo", concluyen desde el estudio.