Fueron un clásico en las casas de las décadas de los 60 y 70 y hoy lo son de los hogares actuales. En un momento desaparecieron, o estuvieron eclipsados, principalmente por los motivos de flores en versión romántica o salvaje y XL o tras la fuerza de los animales exóticos que trajeron la jungla a la casa.
Sin embargo, ahora regresan y lo hacen de una manera triunfal y audaz, al mismo tiempo. Con patrones llenos de dinamismo y en colores fuertes y atrevidos, con espacio para el blanco y negro, vienen dispuestos a conquistar las estancias, incluidos baños y cocinas. Además, dada su gran versatilidad, van por libre, por lo que se adaptan a todos los estilos. Presentes tímidamente en 2024, su estela, tras el verano, seguirá hasta 2025 por su dinamismo innato y su fuerza visual.