Hay pocas cosas más frustrantes que una pared desnuda y sin personalidad… salvo, quizá, una pared con un cuadro colgado “porque había que poner algo”. De hecho, hay tantas casas con combinaciones de láminas anodinas que parece que existe una tienda secreta (o no tan secreta) donde todo el mundo compra las mismas impresiones enmarcadas sin alma. Y eso, para quien ama la decoración, es un crimen de lesa estética.
Afortunadamente, hay vida más allá de los cuadros. No porque sean mala opción —el buen arte nunca es una mala opción—, sino porque el mundo de la decoración de paredes es mucho más amplio y ofrece posibilidades que pueden convertir una habitación en algo realmente memorable. Así que, si quieres dar un poco de carácter a tus paredes sin caer en lo de siempre, aquí tienes algunas alternativas que pueden marcar la diferencia.
![Comedor y cocina abiertos con pared de azulejos](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1280 1920"%3E%3C/svg%3E)
Comedor y cocina abiertos con pared de azulejos
Pol Giné
Revestimientos: Textura y profundidad sin complicaciones
Pintar está bien, pero ¿y si le das a tus paredes un poco de relieve? Los revestimientos de madera, piedra o cerámica pueden transformar una habitación sin necesidad de colgar nada. Un panelado de madera en tonos naturales aporta calidez inmediata, mientras que un revestimiento de piedra o microcemento juega con una estética más contemporánea e industrial.
Si te apetece un toque más artesanal, los azulejos tipo zellige marroquí o las baldosas hidráulicas pueden ser una opción espectacular en cocinas y baños. Como han hecho los expertos de Somos Nido en esta espectacular casa de Lleida, en la que destacan, especialmente, los azulejos de cerámica en tonos neutros que se extienden por la pared exterior de la cocina generando continuidad. Y para los indecisos, están los papeles pintados con efecto texturizado, que imitan desde el hormigón hasta el lino. Resultado impactante sin la obra.
![revestimiento de paredes Glamora COSMO GLX521A AMBIENT](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1500 1061"%3E%3C/svg%3E)
En la colección X de Glamora se encuentran propuestas tan atractivas como esta: el modelo Cosmo, capaz de cambiarle la temperatura al salón.
Glamora
Murales y pintura artística: cuando las paredes son un lienzo
Si te gusta el arte pero quieres huir del clásico cuadro enmarcado, ¿por qué no convertir toda la pared en una obra? Desde murales hechos a medida hasta degradados de color o formas geométricas pintadas directamente sobre la pared, hay mil maneras de jugar con el color y la composición.
Los murales de inspiración botánica están en auge, y si lo que buscas es un efecto más moderno, los trazos abstractos o las líneas orgánicas pueden dar un toque sofisticado y único a cualquier estancia. La Naturaleza o la artesanía son algunas de las inspiraciones de la colección de la firma Glamora. Un sencillo gesto con el que elevarás las habitaciones de tu casa. También puedes explorar la técnica del esponjado o el estarcido, que vuelven con fuerza y pueden aportar un aire vintage sin caer en lo obvio.
Objetos y esculturas de pared: más allá del plano
¿Por qué limitarse a lo bidimensional cuando puedes incorporar objetos que sobresalgan? Las esculturas murales en metal, madera o cerámica son una excelente alternativa a los cuadros y pueden aportar dinamismo y profundidad.
No hace falta ni anclarlas en la pared, un buen fondo blanco puede ser el mejor marco para exhibir una escultura, como ha hecho Bergnes de las Casas en este piso de Barcelona con una obra de Ox Mobiliari.
Los tapices artesanales, por ejemplo, han vuelto con fuerza, y hay versiones contemporáneas que encajan a la perfección en interiores modernos. También puedes colgar cestas de fibra natural, composiciones de espejos de distintas formas o incluso paneles modulares de madera tallada. Si quieres un guiño más experimental, los neones personalizados o los apliques de luz escultóricos pueden ser una opción sorprendente y funcional.
![PISO FUENCARRAL](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1280 1709"%3E%3C/svg%3E)
Una enorme estantería (y el color vainilla) definen esta reforma de Madrid
José Hevia
Estanterías decorativas: belleza con utilidad
A veces, la mejor manera de llenar una pared es hacerlo con algo que tenga una función más allá de lo estético. Las estanterías decorativas permiten jugar con libros, plantas, objetos de diseño y pequeñas esculturas para conseguir un efecto cambiante y personalizado. Nos encanta esta solución en un proyecto del estudio de Gonzalo del Val. Una maravilla.
Las baldas flotantes son ideales para quienes buscan un look más ligero, mientras que las librerías modulares de suelo a techo pueden convertirse en el punto focal de una estancia. Y si te gusta el aire retro, siempre puedes apostar por estanterías de cuerda o modelos con estructura metálica y madera, que recuerdan al diseño escandinavo de los años 50.
Jardines verticales y elementos naturales
Si hay algo que nunca falla a la hora de dar vida a una pared, es la vegetación. Los jardines verticales—ya sean naturales o preservados—se han convertido en una de las opciones más deseadas para quienes buscan una decoración orgánica y con personalidad.
Si no quieres comprometerte con un jardín en toda regla, puedes optar por composiciones de macetas colgantes, ramas secas enmarcadas o incluso una colección de hojas prensadas enmarcadas en cristal, que aportan un toque botánico sin excesos.
![salón ecléctico alfombra marroquí, butaca de mimbre, sofá blanco, tapiz colorido y lámpara roja](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 2000 2641"%3E%3C/svg%3E)
Una casa "de pueblo" del Empordà se ha transformado en el hogar de un artista danés que ha sabido combinar de forma brillante la artesanía de Marruecos con el legado del diseño del siglo XX.
Eugeni Pons
Composiciones con textiles o piezas vintage
Los textiles pueden ser una alternativa inesperada y muy eficaz para vestir una pared con personalidad. Un kilim antiguo, una manta de lana tejida a mano o un retal de seda estampada pueden convertirse en una pieza decorativa única. Así lo hizo el artista Erik Peistrup Mortensen en su casa de L'Empordà con una gran alfombra marroquí. Además, los textiles aportan textura y ayudan a mejorar la acústica de una estancia, lo que es un plus añadido.
Si prefieres algo con más historia, busca en mercadillos y tiendas de antigüedades elementos decorativos poco convencionales: mapas antiguos, puertas recuperadas, persianas de madera tallada… Hay muchas opciones que pueden convertir una pared en una pieza de conversación.