Cómo los tonos oscuros llegan al dormitorio para convertirlo en un refugio para la calma

Los juegos de luces y sombras son un elemento esencial en todo tipo de arte. El interiorismo, como tal, no se queda atrás. Los contrastes forman parte importante del diseño de cualquier estancia, incluso de los exteriores como la terraza o la fachada. Sin embargo, el dormitorio es un espacio todavía más complejo y delicado. Decorar un dormitorio con cuidado y detalle es fundamental para conseguir un buen descanso, recargar baterías y rendir bien al día siguiente. En este sentido, los colores juegan un papel protagonista.

La paleta cromática del dormitorio debe responder a una estética cálida y acogedora. Una de las formas más efectivas para lograrlo es jugando con los contrastes y añadiendo algún tono oscuro. Descubre algunas claves e inspiraciones para crear dormitorios diseñados para el descanso y la relajación. 

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Un dormitorio de aspiraciones oceánicas: verdes, celestes y azules dialogan suavemente.

Conecta con lo más profundo de la naturaleza

Los colores oscuros como el azul marino, el verde jade, incluso algunos más fuertes como el gris topo y el marrón, pueden tener muchos beneficios en la decoración del dormitorio. Además de ser tonos elegantes y profundos, reducen la estimulación visual y crean un entorno ideal para la relajación. Esto se debe a que nos conecta con la serenidad de la naturaleza. 

Los tonos tierra nos transportan hacia la calma del bosque, mientras que los azules nos invitan a la tranquilidad del mar. Una de las tendencias más fuertes del 2025 será el contacto con la naturaleza, por lo que jugar con los colores será clave durante este año. Aplica algunos de estos acentos para que tu dormitorio te permita desconectar del ritmo acelerado del día a día.

Cortinas levemente más oscuras en un ambiente marcado por los colores suaves y tonos verdosos.

Para un mejor descanso

Una de las virtudes de los tonos oscuros en el dormitorio, es que ayudan a descansar mejor. Como señaló la interiorista Meritxell Ribé, en un artículo anterior de Arquitectura y Diseño, "colores oscuros como un azul profundo o un verde oscuro pueden crear un entorno envolvente que facilita el descanso al bloquear la luz y reducir el estímulo visual. Lejos de hacer que la habitación parezca pequeña o fría, un tono oscuro bien escogido puede hacer que el dormitorio se sienta íntimo y acogedor". 

Suelo es de roble de gran formato. Cama modelo Tuffy Too de Patricia Urquiola para B&B Italia. Al fondo, la butaca Corallo, de los hermanos Campana para Edra.

Tonos oscuros, pero iluminados

Para equilibrar la profundidad de los tonos oscuros, la iluminación artificial y natural es fundamental. Crea capas de iluminación añadiendo más de una fuente de luz. Por ejemplo, apliques a los costados de la cama, una lámpara de pie en una esquina y algún plafón en el techo. De esta manera, las sombras de los colores oscuros se suavizarán y las texturas de los materiales resaltarán mostrando todos sus detalles. Asimismo, asegúrate de contar con una fuente de luz natural directa. Los acentos en tonos oscuros deben estar frente a la ventana para evitar que el espacio se perciba como un lugar estrecho y ensombrecido.

Dormitorio en un esquema cromático oscuro de tonos neutros: grises, negros y blancos en una misma paleta.

Un mismo esquema cromático

Una buena forma de aplicar un tono oscuro en el dormitorio es siguiendo un mismo esquema cromático. Si prefieres los espacios que ostentan una continuidad visual evidente, escoge tonos iguales para pintar paredes, techos y muebles grandes. Aplica un detalle como una cortina en un tono más oscuro para bloquear la luz natural y promover un buen descanso. Luego, agrega accesorios en tonalidades medias. Por ejemplo, ropa de cama, un cojín decorativo o un taburete tapizado. 

Un gran cabecero de color gris topo que ofrece un entorno minimalista, pero acogedor. 

Minimalismo cálido y Japandi

Si te preguntas con qué estilos encajan mejor los tonos oscuros en el dormitorio, el minimalismo cálido y el japandi son los más adecuados. Esto se debe a que ambos promueven la creación de espacios serenos, relajantes y tranquilizadores.

Un dormitorio decorado bajo el foco del minimalismo cálido permite la introducción de un acento en marrón sobre una base en mocha mousse, por ejemplo. Asimismo, en un dormitorio de diseño japandi, puedes introducir un toque de azul profundo sobre una base de madera clara. Conseguirás un dormitorio relajante con detalles oceánicos muy tranquilizadores.