Si hay algo que comparten todos los hogares interesantes y bien decorados, es la presencia de una librería. Aunque las grandes bibliotecas son atractivas y llamativas, una pequeña librería también puede saciar tu sed de conocimiento. Si tienes un salón pequeño o un estudio con alguna esquina desaprovechada, este artículo es para ti. Te dejamos los mejores consejos para dar vida a ese rincón olvidado y crear una estilosa librería. 

casa blanca contemporánea con chimenea y toques de color

Las librerías hechas a medida. Chimenea de mármol del anticuario Mavi Lizán. Litografías de Josep Guinovart, alfombra de BSB, sofá reproducción del modelo Polar Bear de Jean Royere. Cojines de Matéria, mesa de centro Foster 620 de Norman Foster para Walter Knoll, en Casamitjana. 

Eugeni Pons | Proyecto de Bea Portabella

Elige el rincón perfecto para tu librería pequeña

Antes de organizar la librería o elegir colores y materiales, vas a analizar la habitación donde quieres instalarla. Posiblemente, el salón sea el lugar más indicado. O puede que quieras hacer una estantería en tu oficina o en el dormitorio. De cualquier manera, ten en cuenta que no necesitas disponer de una habitación entera para crear una biblioteca. Echa un vistazo a estos rincones que, posiblemente, no están cumpliendo una función específica en el interiorismo de tu hogar.  

estantería y librería casa hudson valley

La librería en color gris contrasta con el fuerte amarillo de la escalera.

Brian Ferry | Proyecto de Barlis Wedlick
  • Bajo la escalera: Si vives en una casa o dúplex con escalera, probablemente se ha creado un espacio vacío bajo esta estructura. Este hueco puede transformarse en una librería a medida. Si no quieres colocar una estantería empotrada, puedes comprar una que encaje en el tamaño de la zona. 
  • Enmarcando una ventana o una chimenea: Rodear el ventanal del salón con baldas crea un efecto envolvente. Además, se generará un ambiente intelectual muy interesante gracias a los libros y su disposición. Si no quieres enmarcar la ventana, también puedes enmarcar la chimenea. 
  • En los pasillos: Ya sea en el recibidor o en los pasillos, instalar una librería puede ser una excelente decisión. Aprovecha las hornacinas si las hay o instala algunas baldas de madera natural para dar un toque cálido al ambiente. Eso sí, vigila que los estantes no obstaculicen el desplazamiento dentro de la casa.
  • Detrás del sofá: Si el respaldo de tu sofá queda libre, puedes colocar una librería baja. Además de ser súper útil, le dará un toque decorativo y evitarás la sensación de vacío, sobre todo si el respaldo no se apoya en la pared.
  • En una esquina del dormitorio: Crear un pequeño rincón de lectura en el dormitorio le dará un aire especial. Instala una pequeña librería en la pared del cabecero o en una esquina frente a la cama.
  • En el espacio bajo la ventana: Una librería de baja estatura ubicada en este sitio permite aprovechar la luz natural. Además, es una zona que solemos dejar sin uso. Complementa con un banco acolchado o cojines para conseguir un rincón acogedor. 
librería blanco apartamento deza Setien

Librería a medida con un volumen de chapa de nogal.

David Zarzoso | Proyecto de Deza Setien

Materiales para una librería pequeña

Los materiales que escojas para tu librería dependen del estilo del lugar donde la instales. Normalmente, se diseñan estanterías de madera maciza, ideales para salones clásicos, modernos o con toques nórdicos. Aquellas metálicas o en madera sin tratar son perfectas para una oficina o una sala industrial.

Las librerías con superficie de cristal son más delicadas, pero son aconsejables en caso de que la estancia sea muy pequeña. No olvidemos que el vidrio aligera visualmente el espacio y refleja la luz, aportando claridad al entorno. También puedes combinar madera y cristal instalando una vitrina tradicional para guardar tus libros. Los protegerás del polvo y los mantendrás en excelente estado. 

Verstuyft libreria biblioteca

Butaca y puf Little Petra de Viggo Boesen editada por &Tradition, mesita de Cees Braakman para Pastoe. 

Eugeni Pons | Proyecto de Hans Verstuyft

Por último, las librerías de obra que van directamente empotradas a la pared y se pintan en el mismo color, son ideales. Estas estanterías fabricadas a medida ahorran espacio y crean una sensación de continuidad visual, perfecta para estancias pequeñas. 

bergnes de las casas salónsofá gris butaca piel negra cuadro

Lounge Chair de los Eames editada por Vitra. Aparador Sussex de Terence Woodgate para Punt. Butaca Claude de Shinsaku Miyamoto para Ritzwell en CasaMitjana.

Eugeni Pons | Proyecto del del estudio Bergnes de las Casas

Complementa con detalles decorativos

Sí, los protagonistas de este mueble serán los libros. De eso no hay duda. Pero, ¿por qué no complementar con algún detalle especial? Añade objetos que den un toque auténtico al mueble. Después de todo, la idea es conseguir una librería con un sello personal y no un escaparate de tienda. Para esto, nada mejor que acudir a tus gustos personales. Puedes decorar tu estantería con plantas pequeñas, jarrones, alguna vela grande, una escultura o un cuadro. 

Casa en Australia junto a la playa zona de lectura

Sillón Up Series 2000 de Gaetano Pesce y pared con cuadros.

Anson Smart | Proyecto de Arent & Pyke

Si tienes espacio suficiente, puedes crear un pequeño rincón de lectura. Diseña un sitio acogedor para sentarte a leer cuando quieras: una butaca, una alfombra y una lámpara con luz focal son todos los elementos que necesitas.