5 IDEAS para ganar privacidad en cocinas abiertas más allá de la típica puerta de cristal (CON FOTOS)

Las distribuciones abiertas, que comenzaron a popularizarse en la vivienda a mediados de la década de los 70 y cuyo bum definitivo en el hogar llegó tras la pandemia, son las preferidas en el diseño del hogar. En todo caso, y sin entrar en profundidad en las razones, en la cocina vuelve a demandarse cierta independencia. En muchas viviendas con los suficientes metros cuadrados, la despensa empieza a actuar casi como una segunda cocina, pero, sobre todo, y tal y como nos contaban en esta entrevista los arquitectos de La Reina Obrera, los propietarios que hacen reforman en casa demandan cocinas abiertas a la zona de día, pero con cierto grado de independencia. La manera más rápida de conseguirlo es con una partición de vidrio, pero existen otras alternativas interesantes para conseguir sensación visual y física de intimidad.

Salón abierto con la zona de estar por debajo de la altura del resto de los ambientes

Hundir o elevar el suelo reforzará la sensación de independencia de la cocina

Si vas a hacer reformas en la zona de día, una forma de ganar algo de privacidad en la cocina respecto al resto de la zona de día es modificando ligeramente la altura del suelo. Si, por ejemplo, decides hundirlo unos centímetros en la zona de estar, puedes reforzar esa sensación de aislamiento colocando algunas plantas de porte grande a modo de barrera visual. Del mismo modo, elevarla introduciendo un par de escalones la separará física y visualmente de la zona de estar.

Una cocina abierta con una isla con un salpicadero más alto a modo de murete, que separa la cocina del comedor

Elevar la altura del salpicadero en una isla independizará la cocina de la zona de día

Si has decidido apostar por una isla en la cocina, una manera de independizarla respecto al salón-comedor es diseñado un salpicadero que actúe a modo de barrera. De ese modo, se crea una barrera física que, entre otras cosas, también impide que se vean los platos o vasos sucios de la comida, pero también genera la sensación de un espacio más privado.

Cocina abierta con isla y unos sofás grises con cojines de tonos cálidos definiendo la zona de estar

Un sofá es una buena manera de definir ambientes sin separarlos por completo

En una cocina abierta a la zona de día, el sofá es un elemento perfecto para definir ambientes y, además, disfrutar de una pieza de acento capaz de transformar la decoración del espacio.

Salón y cocina separados por una estantería 

Estanterías abiertas, una opción decorativa y funcional al tiempo

Una estantería abierta es una de las opciones más obvias. Puedes colocar en algunas de las baldas libros, algún accesorio decorativo y, desde luego, pequeñas plantas. Otras las deberías dejar vacías para permitir que la luz entre por ellas. Dividirás el espacio físicamente, pero sin llegar a independizarlo de una manera radical. Nos gusta también cómo se separa la cocina del resto de la zona de día mediante la imponente estantería de la foto. Fíjate en como se prescinde de puerta en la parte izquierda, dejando un amplio espacio libre que relaciona ambos espacios visualmente, pero mantiene su independencia.

Unas cortinas sobre rieles pueden ser una manera suave de proporcionar independencia a la cocina en una zona de día diáfana

Cortinas y biombos, dos soluciones de moda para ganar privacidad en cocinas abiertas

Unas cortinas sobre rieles son una idea fantástica que está ahora de moda. Es una manera ‘suave’ de dividir un espacio. ¿A qué nos referimos con el término suave? Además de no ser un elemento rígido, dependiendo de la tela que se use la sensación será de mayor o menor transparencia. También puede usar unos estores y subir algunos mientras otros los dejas bajados. Los biombos también están de moda. Puedes elegirlos de diferentes motivos, materiales y colores y aportarán un toque de color. Además, también son muy fáciles de mover.