Un dúplex familiar de 270 m² que fusiona comodidad y diseño contemporáneo

Este elegante dúplex de tonos serenos fue diseñado por la arquitecta Anna Kashentseva, fundadora de Kann buro, para una familia con cuatro hijos. Los propietarios adquirieron tres apartamentos en un edificio recién construido en el centro de Moscú: dos viviendas contiguas con 200 m² en la última planta y una más de 70 m² en la planta inferior. El principal objetivo de la pareja era dar vida a un hogar con el que sus hijos siempre sintieran que tenían un refugio al que regresar, sin importar las circunstancias.

"Mi principal prioridad como arquitecta fue el diseño de unas amplias zonas de almacenamiento, unos armarios empotrados espaciosos y unas habitaciones infantiles que fueran cómodas y acogedoras", comenta la autora del proyecto. Aunque la distribución se adaptó a las necesidades de la familia, el diseño equilibra elegancia y funcionalidad en cada rincón.

El apartamento superior alberga las zonas comunes —recibidor, salón y cocina—, junto al dormitorio principal con baño y vestidor; dos habitaciones infantiles con baño y armarios empotrados, y un despacho. El apartamento inferior incluye dos habitaciones independientes para los hijos mayores, un baño, vestidor y cuarto de lavado.

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Una escalera con carácter

Las dos viviendas se conectan a través de una escalera de diseño ergonómico y revestida en madera. En la pared hay un dibujo del artista Valery Koshlakov.

Luz y amplitud

Los amplios ventanales que bañan el dúplex con luz natural son uno de sus mayores atractivos y crean una atmósfera luminosa y contemporánea. Cada rincón se inunda de claridad, lo que proporciona la sensación de un entorno amplio y aireado.

Equilibrio y sofisticación

La paleta de colores, cuidadosamente elegida, se basa en tonos suaves y discretos, con pequeños acentos en puntos estratégicos. El salón y la cocina se han decorado en tonalidades neutras como beige y gris, mientras que en los dormitorios y el despacho, unas pigmentaciones más oscuras aportan profundidad y elegancia al conjunto.

Detalles invisibles

Los techos de altura moderada representaron un desafío, pero esto se solucionó con una integración cuidadosa de las instalaciones. "Lo que más me satisface de este proyecto es haber logrado reducir la visibilidad de los registros y rejillas en los techos, gracias a los estrechos y modernos paneles Invisiline", asegura Anna.

Materiales nobles

"El uso de materiales variados siempre supone un reto en un estilo moderno, pero conseguimos que todo se armonizara perfectamente", explica Anna. En los pasillos, las paredes revestidas en algodón natural, con unas tonalidades vibrantes, crean una sensación de calidez, lo que hace de esta zona un espacio destacado en el diseño interior.

Un lugar de encuentro

Para crear una zona de comedor funcional y armoniosa, la arquitecta optó por una mesa amplia de Tonin Casa y sillas ergonómicas de Ceccotti, ofreciendo comodidad sin comprometer el estilo. La lámpara de Giopato & Coombes, situada sobre la mesa, aporta una iluminación suave, realzando el ambiente para encuentros y cenas familiares.

Estilo refinado

En el pasillo, unas lámparas de araña vintage y los apliques de pared de Baxter aportan un toque mid-century. La consola y el puf, también de Baxter, junto a los jarrones en tonos borgoña, añaden un sutil contraste que acentúa la elegancia de la vivienda.

En blanco y negro

La cocina de Siematic presenta un elegante contraste en blanco y negro. La isla de mármol aporta sofisticación moderna, mientras que los taburetes de bar de Baxter suman un acento oscuro.

Texturas lujosas

El dormitorio principal se reviste en seda natural de un tono gris profundo, con detalles en marrón y borgoña, lo que aporta una dimensión extra a la estancia. Cama de Minotti, mesitas de noche de Pianca, pouf de Baxter, lámparas de Visual Comfort.

Estética y funcionalidad

Las paredes del despacho, también recubiertas de algodón natural, complementan la paleta del dormitorio, pero con una textura más marcada que define este ambiente. "La combinación de materiales nobles no solo es estética, sino también práctica. Elegimos suelos de madera maciza y piedra natural", añade Anna.

Mesa de Porada, silla de Poltrona Frau, candelabro, lámpara de pie de Visual Comfort

Refugio personal

El dormitorio del hijo mayor fue diseñado con tonos tranquilos, para fomentar una atmósfera acogedora. Cama y estantería de LAGO, lámparas de Brokis y escritorio de Gubi.

Mobiliario exclusivo

"Seleccionamos muebles de marcas italianas, como Baxter, cuyas piezas destacan por sus estampados en cuero. Estos elementos aportan un toque único y personalizado al espacio", cuenta Anna. Estanterías de Rimadesio, mesa de centro de Minotti.

Zona de trabajo y sosiego

El salón cuenta con un área de trabajo integrada, con estanterías Shelving by Rimadesio, las cuales refuerzan la sensación de orden y sofisticación. Escritorio de Ritzwell, silla de Poltrona Frau.

Pasión por el arte

Los propietarios, grandes amantes del arte, incorporaron obras de gran valor a su hogar. En la suite principal, sobresale un tapiz de Tatiana Karamysheva, que se convierte en el centro visual del dormitorio, aportando una carga emotiva y estética al entorno.

Toque artístico

La entrada está adornada con una obra creada por Anna Kashentseva especialmente para este proyecto, un detalle que subraya el matiz personal y singular.

Tonos dorados en el baño principal

Los apliques de Visual Comfort y el espejo de Porta Romana aportan un toque de distinción a esta estancia tan íntima.

"Estoy convencida de que el éxito de mis proyectos radica en la confianza mutua con el cliente. Cuando hay apertura ante las propuestas innovadoras, esa confianza se convierte en la base de cualquier proyecto exitoso", concluye Anna Kashentseva.