Los proyectos de la interiorista Cristina Puerta destilan un estilo minimalista cálido en el que con pocos gestos transmite muchas emociones diferentes. Texturas, estampados y materiales son tres de sus herramientas clave para contar historias; las de los propietarios que la escogen para diseñar sus casas. Por ejemplo, el papel pintado o unas sofisticadas lámparas de rejilla con detalles dorados son dos recursos que utiliza en la casa Armonía. En la casa Salvia escoge el color y juega con la luz para dar forma a un interior fresco pero elegante.
Arcos y curvas como elementos clave del interiorismo
En este proyecto que enseñamos aquí: la casa Resplandor, un piso muy cerca de la plaza de España, en Madrid, arcos, curvas, materiales naturales y líneas orgánicas definen una decoración armoniosa y coherente. Específicamente sobre los arcos, Puerta cuenta que la intención fue hacer de ellos “una característica arquitectónica clave en este hogar. Los arcos inspiran y se plasman de manera sutil y elegante en los muebles y la decoración, aportando continuidad y belleza a todo el espacio”, dice.
Un mobiliario elegido con cuidado que contribuye a dar forma a un interior coherente
La interiorista ha escogido muebles de líneas curvas y orgánicas. La espectacular mesa del comedor, por ejemplo, presenta una forma curva “que recuerda a la suavidad de los arcos que hacen de puerta de entrada al salón”. También las sillas que la acompañan siguen el mismo diseño curvo, añadiendo cohesión visual al conjunto y reforzando la temática arquitectónica a la que la interiorista hace referencia.
Hay más detalles de cómo esa temática de los arcos a la que hacemos referencia se incorpora en la decoración, como el generoso sofá curvo que da forma a “un rincón de descanso elegante y acogedor frente a la chimenea”. Otras piezas inspiradas en los arcos, como el aparador con esquinas redondeadas, la alfombra, butacas y demás elementos decorativos, “realzan la belleza y el diseño interior de la casa, brindando una experiencia visualmente impactante y armoniosa para la familia que vive en ella”.
Papel pintado y madera para añadir una nota de contraste
Puerta no ha jugado todas sus cartas al organicismo. Así, ha elegido papel pintado con líneas y las molduras clásicas para aportar contraste y equilibrar la presencia de los arcos y los elementos curvos. “Las líneas rectas y las molduras aportan estructura y orden al ambiente, creando un efecto de equilibrio y contraste que enriquece la estética general de la casa”. Otro material que le pareció importante introducir fue la madera. Para la interiorista promueve un ambiente de serenidad y armonía en cualquier hogar. En este caso, cuenta que se ha servido de ella para aportar “una sensación de conexión con la naturaleza”.
Se recrea la interiorista en los detalles en este proyecto. Así, jarrones, lámparas y textiles añaden la textura necesaria “para crear un espacio acogedor, cálido y lleno de personalidad”. Finalmente, los ventanales se han restaurado y personalizan el espacio.
Una cocina de líneas rectas
Otro espacio en el que merece la pena detenerse es la cocina. Se trata de un diseño de líneas rectas de Inko Cocinas con el que se busca “conseguir sensación de orden y espacio. La parte más visual es el marco que conseguimos con los muebles de madera y la encimera, de Inalco, que se integra con el color de los muebles bajos, dando sensación de bloque en la península”.
Un dormitorio elegante y moderno
En cuanto al dormitorio principal, se ha elegido un elegante y funcional vestidor de Uecko Armarios “que combina funcionalidad y estilo para organizar y exhibir la ropa con clase”. El dormitorio, como el resto de la vivienda, es un espacio sofisticado y acogedor “que invita a disfrutar de momentos de tranquilidad y conexión en ambientes que fusionan la tradición con la comodidad moderna”.