Sensaciones únicas
Nada iguala las sensaciones que transmiten una manta de lana virgen, una sábana de algodón orgánico, un sofá de cuero o un suelo de madera. Los materiales naturales aportan emociones que estimulan un ánimo favorable y expresan un interiorismo más honesto y perdurable.
Protección sútil
Unas ventanas sin cortinas quedan desangeladas. Desde Gastón y Daniela, sugieren elegir telas de gran caída como lanas o terciopelos finos. Además, son la mejor manera de resguardar el calor sin necesidad de encender la calefacción.
Con buena luz
Está más que demostrada la relación entre la luz natural y nuestro equilibrio físico y mental. por eso es importante que nuestra casa aproveche al máximo los rayos del sol, y multiplicar sus efectos con materiales, acabados y texturas que la reflejen, como el color blanco, las maderas en tonos claros y las superficies pulidas. Y no olvidemos que cuanta más luz natural, menos gasto en iluminación.
Fragancias sugerentes
Ciertos aromas transmiten sensaciones positivas, como las notas frescas de lavanda, que se utiliza entre otras cosas para inducir al descanso. O la mejorana y la rosa damascena, que inspiran seguridad y paz interior.
Bálsamo natural
La vegetación nos reconecta con la naturaleza, ejerce una influencia positiva en nuestro ánimo y propicia una atmósfera saludable, oxigenada y limpia en los interiores gracias a su capacidad de regular la humedad y neutralizar sustancias tóxicas. Las plantas aromáticas también son un recurso útil para la cocina. 2x1.
Pisadas felices
Las alfombras dan calidez a un suelo desnudo y frío, y enmarcan espacios para sentirnos más arropados en el salón o el dormitorio. Las de lana virgen o con mezcla y las de algodón de pelo largo son cálidas en invierno y frescas en verano, y actúan como excelentes aislantes térmicos.
La luz que nos favorece
Más allá de loa luz natural, para crear una atmósfera cálida, desde Biosca & Botey, recomiendan la luz regulable. Otra herramienta para crear ambientes acogedores es colocar distintos puntos de luz en la librería, los aparadores, etcétera. Y no hay que renunciar a la magia del destello natural de una vela.
Sin obstáculos
La disposición de la decoración debe conseguir un efecto de movimiento ligeramente sinuoso, lo que según el feng shui favorece el flujo del chi, la energía que da vida. La sensación de respaldo y seguridad de un sofá se refuerza colocándolo contra la pared y con una buena visión del acceso al estar.
Todo en su sitio
El orden es sinónimo de equilibrio; con él se logra tranquilidad emocional y bienestar porque todos los muebles y objetos de la casa tienen su espacio. Cajas, cestas y separadores ayudarán a tenerlo todo organizado tanto en estanterías a la vista como dentro de los armarios y los cajones.
Un lugar evocador
Los retratos familiares, cuadros e imágenes de recuerdos son siempre compañeros especiales. Se pueden colgar con sistemas que no ocupen espacio, con marcos de perfiles delgados o directamente sobre la pared. Puede jugarse con la mezcla de estilos y las composiciones geométricas.
Un tono agradable
Acertar con el color crea ambientes en armonía que no cansan. “Beiges, grises y blancos no pasan de moda y sirven de base neutra para cualquier tipo de decoración”, afirman desde Grupo Porcelanosa. El twist se le puede dar con papel pintado, hay mil opciones.
El broche final
Los cojines y plaids son mucho más que complementos decorativos. Los de pelo largo, como el mohair, abrigan los espacios, los hacen más confortables y son los aislantes térmicos perfectos. Como sumatorio son un recurso ideal para dar un aire nuevo al espacio de forma inmediata y económica.