Que si absorben la luz, que si hacen que los espacios parezcan más pequeños, que si apagan cualquier estancia, los colores oscuros arrastran una fama que no les corresponde ni se merecen. Porque sí, todo eso puede pasar si no se saben utilizar bien las tonalidades oscuras. Existe además la creencia de asociar colores oscuros solo con el negro (haz la prueba y busca psicología colores oscuros en Google, todas las entradas remiten a ese color). Y no. Abramos la mente a toda la paleta cromática y dejemos que los colores oscuros entren en nuestra vida.

¿Por qué? porque aportan profundidad, logran crear ambientes envolventes, infunden un punto de sofisticación y algo de dramatismo, ¿qué mas se puede pedir? Saber combinarlos, pero eso te lo vamos a contar ahora mismo.

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cocina de la casa de Leopoldo Pomes en azul, negro y suelo rojo, con butacas
Kave Home

Azul sobre negro y rojo

Como un escenario o el decorado de una película, así es la cocina del fotógrafo Leopoldo Pomés en Barcelona, y no puede parecernos más acertado. Apostar por tonos como el azul para la isla, negro para los muebles o rojo para el suelo y las paredes puede hacer explotar la cabeza de algunos, pero el efecto es sublime. La luz de la ventana se cuela y sus juegos de sombras realzan el espacio. El resultado es una cocina muy elegante y cálida, que invita a pasar horas en ella. 

Dormitorio con banco junto a la ventana de una casa en Australia
Amelia Stanwix

Mostazas que brillan

Mostaza y verde oliva es otra de esas combinaciones que resultan de lo más acertadas. Vivos y animados, destacan sobre matices de blancos y entradas de luz, por lo que son muy apropiados para espacios iluminados como una zona de lectura o una mesa de tocador en el dormitorio, lo más cerca posible de una ventana.

sofa en tonos marrones, pared y suelo de hormigon y ventanas de suelo a techo
ARANPRIME / UNSPLASH

Marrón para un aire rústico

Asociado con lo marchito y uno de los colores más denostados de la paleta cromática, el marrón y sus gamas son la tierra, lo que nos ancla a ella. Si nos preguntaran un color para simbolizar lo terrestre, arena o montañas, ¿no diríamos sin dudarlo este color? ¿Entonces por qué renunciamos a él con tanta facilidad? El marrón es un color elegante, el chocolate rezuma sofisticación, el que tira a negro combina con casi todos los colores y junto a, por ejemplo, el gris de un sofá o de unas paredes de hormigón, convierte una zona de paso en un lugar donde quedarse. Es nuestra apuesta segura para un salón rústico o con aires de campo.

salon con dos butacas rojas, paredes azules, una escalera y chimenea
VOLKAN VARDAR VÍA UNSPLASH

Dramático y sublime

La fuerza de los colores oscuros resulta avasalladora en esta combinación. Es sublime y nos hace amar todavía más la apuesta por los tonos con tanta personalidad. Un salón resuelto con paredes en azul muy oscuro, una escalera negra y unas butacas de un intenso y brillante rojo aterciopelado infunden un dramatismo buscado y conseguido que llena de personalidad una casa. Tres colores básicos y la teatralidad está servida.

escalera de madera en blanco con pared gris y suelo hidraulico
Eugeni Pons

Un toque de profundidad

Al decir colores oscuros tendemos a pensar que todo tiene que ser negro o sombrío. Y nada más alejado de la realidad. A veces solo es cuestión de encontrar el lugar perfecto donde aplicarlo. Si tienes una casa luminosa y grandes ventanas, entonces prueba a pintar una pared. El gris es un color muy sutil que ayuda a dar profundidad a una estancia, y queda perfecto junto a un punto de luz.

zona de estar toda en color rojo con sofá y ventana abierta
DEREK SWALWELL

Rojo en texturas

Si te dijeran la famosa frase de todo al rojo, pensando en la zona de estar de tu casa, pensarías que es una broma. Pero si vieras el resultado entenderías la maravilla que sería. En este caso, son las texturas las que marcan la diferencia si vamos a utilizar la misma gama en una sola estancia. La moqueta, el terciopelo del sofá, los suaves cojines, el mueble acabado en brillo para que refleje la luz de la ventana, cada pieza aporta un matiz distinto pero siempre con el color, el rojo en este caso, como elemento denominador común.

rincón de una salon con sofá amarillo y paredes verde
Inna Kostukovsky

Un rincón verde

Hace ya tiempo que sabemos que el color verde llegó para quedarse, y no solo en forma de plantas. Su reminiscencias a la naturaleza lo convierten en un perfecto aliado cuando de potenciar rincones se trata. Por eso, el verde bosque tiene un efecto mágico en zonas como el salón, pues logra convertirlo en una zona alegre y luminosa. La combinación es perfecta si mantenemos el techo en blanco y colocamos puntos claros en amarillo en forma de sofá o estantes de madera.

Habitacion con lampara y en colores oscuros
AMELIA STANWIX

Para desconectar

Nos encantan los espacios luminosos, pero el dormitorio es el lugar donde nuestros ojos y nuestra mente necesita relajarse y desconectar poco a poco. Por eso resulta un acierto hacerlo en colores más oscuros. En este apartamento de Melbourne, la diseñadora de interiores Fiona Lynch llenó de colores claros las estancias comunes, pero oscureció, y con un punto de dramatismo, las zonas privadas. De esta forma, en el dormitorio principal, las paredes se tiñen de negro, con textiles también negros y grises, consiguiendo un punto sofisticado con una dramática cortina opaca que emula el color dorado. Es una combinación brillante.

 

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