Cuando suben las temperaturas, para paliar el calor nuestra opción favorita pasa por darnos un chapuzón en el mar, en un lago o una piscina. Aunque emular el momento lluvia y dejar que el agua se deslice bajo la piel también nos ayuda a encarar el calor desde una perspectiva más hedonista. Y poder hacerlo solo requiere una ducha de exterior, que permite disfrutar al máximo de los meses de buen tiempo, ya sea para quitarse el cloro o el salitre de la piel o para refrescarse mientras se toma el sol en la terraza de casa. En el mercado hay soluciones para cualquier espacio.
¿Qué tipos de duchas de exterior hay?
El mercado ofrece una amplia variedad de tipos para todos los gustos y necesidades, aunque se pueden clasificar en dos grandes grupos: las que no necesitan instalación y las que la requieren:
- Las que no necesitan instalación
Se caracterizan por ser de trípode o de pincho, de materiales ligeros como el aluminio o acero y se conectan al agua a través de una manguera flexible. Desde Leroy Merlin aseguran que este tipo de duchas tienen la ventaja de ser ligeras y portátiles, "lo que hace que podamos trasladarlas de un sitio a otro con total facilidad y recogerlas cuando sea necesario. Para instalarlas hay que colocar un racor a la toma del agua y conectar a la manguera", explican y advierten de la importancia de poner una junta de estanqueidad para evitar filtraciones. Otra ventaja es que son regulables en altura y pueden llegar a 2 metros.
- Duchas que sí necesitan instalación
Debemos colocarlas cerca de la toma de agua y conectarlas a la tubería o a la manguera enganchada a un grifo. Son fijas, por lo que debemos pensar bien su ubicación. "Esta instalación requiere de unos conocimientos para abrir las rozas para hacer las conexiones de agua directamente en las tuberías (en lugar de en la manguera) y posteriormente cerrarlas y embellecerlas para que queden ocultas a la vista. La labor de fontanería es igual que para una ducha de interior puesto que también puede instalarse una toma para agua fría y otra para agua caliente", dicen desde Leroy Merlin.
El catálogo es amplio, ya que existen duchas individuales, que vienen con una base, o con más de un brazo (normalmente hay de dos brazos o de cuatro).Y además se pueden elegir de diversos materiales, como forradas de madera, en PVC o en acero inoxidable preparado para soportar el agua sin que el material se estropee.
Así son las duchas solares
Aunque están pensadas para refrescarse, cuando no convence la idea de que el agua salga siempre fría y no se quiere invertir en complejas instalaciones de fontanería, hay una alternativa muy práctica: las duchas solares, que calientan el agua con la energía del sol. Cuentan con un acumulador de agua que suele oscilar entre 20 y 40 litros y son la solución más económica porque se evita el consumo de electricidad necesario para templar el agua. "Aunque precisen de instalación, estas duchas están pensadas para que podamos hacerlo sin necesidad de un instalador profesional", detallan desde la firma especializada en bricolaje.
Todas las duchas solares vienen con una base y tornillos que se anclan al suelo y para la toma de agua se puede elegir entre fijarle una tubería o engancharla a una manguera. elegir entre dos opciones: bien conectarla a una tubería, que requiere tareas de fontanería, o bien engancharla a una manguera.
Dónde poner una ducha exterior
A la hora de decidir la ubicación hay que tener en cuenta el espacio disponible y el modelo de ducha que elijamos. Así si optamos por un diseño solar, es importante ubicarlo en un emplazamiento que no sea sombrío. Antes de instalar cualquier diseño hay que asegurarse de que el terreno esté bien nivelado. Y, como apuntan desde Leroy Merlin, es importante garantizar un desagüe adecuado. "Si vas a instalar la ducha en un jardín o al lado de una piscina o sobre césped hay que garantizar que hay un buen drenaje del agua o pendiente para que el agua corra hacia dónde va a caer, que puede una zona de riego de plantas o un sumidero. Si va a estar en un patio o terraza requiere un sumidero, lo que implica una obra mayor".
Materiales según el presupuesto
Sea cual sea el diseño elegido, hay que tener en cuenta que las duchas de exterior deben estar preparadas para soportar la intemperie sin estropearse. Los modelos de plástico son los más económicos, aunque también los menos duraderos, y los de acero inoxidable son los que ofrecen una mayor resistencia y durabilidad, aunque como pesan más requieren de anclaje a la pared.