Gastronomía para el disfrute
Su historia pesquera hace que no nos sorprenda que el pescado y el marisco tengan un peso importante en sus platos, compartiendo espacio con las hortalizas. Los arroces, como no, destacan en la localidad alicantina, como es el arroz, con alubias y pulpo, de cebolla y bacalao, o caldoso y de bogavante; y la paella, mixta, de boquerón…
El recetario de Altea incluye también las tradicionales cocas a la llumà, un nombre que proviene de la caña que se encendía próxima a la coca una vez estaba en el horno yq ue le proporcionaba un tono dorado. Ahora se pueden comprar en las panaderías del pueblo los jueves y los días de fiestas locales. Otros dulces populares de Altea son la coca farcida, de pisto, y los bollos de bleda o de farina de dacsa, empanadas fritas rellenas de espinacas, anchoa o morcilla.
Entre los restaurantes más distinguidos de la localidad, encontramos Oustau, recomendado por la Guía Michelin y especial por su base francesa y alma mediterránea. Otros muy destacados son: Xef Pirata, ideal para tapas y con producto de mercado; Ca Joan, de carnes a la brasa; La Costera, de alta cocina en una atmósfera íntima y calmada; El Cranc Chiringuito, de cocina marinera a pie de playa; e In Bocca al Lupo, para probar delicias italianas.