El paraíso está más cerca de lo que crees...

Mykonos es una de las joyas de nuestro Mediterráneo oriental. Allí, entre su terreno irregular, salvaje, y playas de agua turquesa, se asientan las Villas Kinglike Comfort; una serie de casitas blancas con todo lujo de comodidades. Esta es la Villa Feelings, que se adapta al paraje escarpado mediante módulos que esconden estancias donde pasar unas vacaciones de ensueño. 

Su cocina, por ejemplo, es un fiel reflejo de cómo exterior e interior hablan un mismo lenguaje. Todo aquí te hace recordar donde estás, con todo su encanto y carisma, sin olvidar los últimos avances tecnológicos para la máxima comodidad de sus afortunados huéspedes. 

La conexión entre el paisaje y los interiores de las villas es constante, gracias a grandes ventanales que dejan pasar las vistas, convirtiéndose en claras protagonistas mediante el uso del color blanco impoluto y una decoración simple y autóctona. 

Pero quizás el tesoro mejor guardado de Villa Feelings es su porche ante la imponente piscina con borde infinity. No es difícil imaginarse disfrutando de un aperitivo soleado con familia y amigos en este lugar, frente al paisaje. 

Además, estas villas incluyen servicio de atención al cliente totalmente personalizado. Desde reservas en restaurantes de moda hasta entrenadores personales y chefs en la misma casa, los huéspedes no solo tienen garantizado un alojamiento premium, sino más bien experiencias de vacaciones hechas a medida.
 

Desde este plano cenital podemos ver cómo Villa Feelings se adapta al terreno escarpado de Mykonos, con balcones al mar que son los diferentes niveles de la casa, asomándose al mar Egeo. 

Las más de 200 villas disponibles de la firma Kinglike ofrecen una gran variedad de residencias vacacionales en la isla. Difieren en tamaño, diseño y comodidades, pero comparten una estética común que combina una versión contemporánea de interiores minimalistas con la arquitectura típica de la zona.
 

Este es uno de los espacios de Villa Faith, por ejemplo, en el que la simplicidad no está reñida con el lujo que se respira. Estancias diáfanas, distribuidores cómodos, una decoración a base de materiales ligeros y fibras naturales... Todas estas villas comparten el mismo espíritu Mediterráneo. 

La artesanía tradicional de las islas Cícladas es perenne en estas residencias vacacionales, cuyas cristalinas piscinas tienen distintas formas, dependiendo del terreno donde se halle la villa. Esta tiene por nombre Alaia y en ella se respira paz, a través de la mezcla de los colores tierra, el blanco de las fachadas y el azul del cielo y el mar.
 

En su interior, la decoración boho chic da una enorme personalidad relajada a unas distribuciones esencialmente pensadas para el disfrute total de sus habitantes. Vestidores en el dormitorio, baños con vistas y demás sorpresas dan la bienvenida. 

Una de estas sorpresas es la de esta ventana que conecta directamente con la piscina de una de las villas. Las vistas desde la cama no pueden ser más originales y placenteras.

Paz es la palabra que mejor describe este escenario. El catálogo de villas de Kinglike abarca desde casas con capacidad para 4 personas, hasta 32. Así pues, puede satisfacer todo tipo de necesidades vacacionales, desde escapadas íntimas hasta reuniones familiares, de amigos y celebraciones. Los amplios espacios al aire libre, con hamacas, bares en la piscina, pérgolas y las impresionantes vistas del mar Egeo, son el lugar perfecto para que los huéspedes tomen el sol, descansen y cenen con elegancia y confort.

Desde el desayuno en la terraza y las fiestas en la piscina por la tarde, hasta las barbacoas por la noche, con sus cócteles, las villas están pensadas para disfrutar de la vida al aire libre, con todo el glamour de Mykonos. En la imagen, Villa Sunset, donde los atardeceres son espectaculares. 
 

Se ha prestado la misma atención a las áreas interiores, generalmente repartidas entre dos o más niveles, que a las exteriores, siempre orientadas hacia las mejores vistas del paisaje circundante y el horizonte. En la foto, Villa Temptation. Sí, toda una tentación. 
 

Los acabados curvos de todas las superficies no son baladí. Las Villas pretenden transmitir ante todo relax y calma, algo para lo que este tipo de bordes están perfectamente indicados. En estas casas todo fluye. 

Curvas hasta en las cocinas. En esta, de la Villa Beauty, puede verse cómo las paredes se adaptan a la irregularidad del terreno. Las casas se funden con la roca, creando espacios de lo más naturales.

En este dormitorio de la Villa Beauty pueden verse los dos únicos tonos permitidos: blanco y madera al natural. Este dúo da como cono resultado ambientes serenos, donde se respira calma.

En esta imagen, perteneciente al exterior de la Villa Nammos, se pueden ver las dos piscinas de la casa, volcadas al mar. Una vez dentro de la infinity pool, no sabes donde acaba la piscina y donde empieza el Egeo.

Villa Jewel. Desde jacuzzis al aire libre, gimnasios totalmente equipados y salas de cine, hasta un spa, un club privado con piano y sistema de sonido envolvente Dolby totalmente equipado, e incluso tu propio helipuerto: no hay ningún deseo que no pueda cumplirse en estas villas de lujo.

Este porche de la Villa Marion es un mirador de excepción. Equipado con mobiliario moderno, tanto en su zona de estar como en el comedor, es todo un ejemplo de estilo.

En la Villa Pietra podemos encontrar esta simbiosis entre playa y piscina de lo más apetecible.

Los bordes de esta piscina, en la Villa Kounoupas, también se desdibujan para dar la sensación de estar en la playa sin moverte de casa. 

Un porche que lleva a la piscina es otra de las propuestas que se hacen en esta serie de villas, concretamente en su Villa Style, cercana a la principal ciudad de esta isla Cíclada. 

Algunas villas incluso tienen acceso directo a alguna de las playas más bonita de Mykonos. ¿Qué más se puede pedir?