Raul Sanchez Architects ha diseñado una clínica dental en Valencia que huye de todo lo preestablecido en el sector. Éste es un proyecto fresco, surrealista y lleno de color, pensado para un publico nuevo. El target de Impress Dental Clinic es la gente joven, de hecho, se diferencian de su competencia por haber desarrollado un catálogo de tratamientos online que reducen las visitas del paciente a las salas del dentista.
El local es largo y tiene una forma irregular, con un pequeño acceso a la calle y con muy poca luz natural. Teniendo en cuenta las particularidades del espacio, los arquitectos propusieron la construcción de dos paredes curvas, que se extienden longitudinalmente a lo largo del espacio, y que juegan entre ellas acercándose y alejándose para crear así diferentes espacios. En las zonas intermedias más anchas se encuentran las diferentes salas de espera.
Estas líneas curvas llegan hasta lo que sería la zona más oscura y complicada del local, la parte trasera, pero que RSA ha convertido en lo más potente y espectacular de la clínica. Inspirada en la icónica Twin Peaks de David Lynch, el arquitecto lo ha apostado todo al rojo, el color corporativo; moquetas, placas metálicas en las paredes y mobiliario. Esta surrealista sala con aires espaciales se utiliza para eventos, incluyendo las demostraciones de los tratamientos de la marca.
Los boxes dentales tienen también un aspecto irreal, casi onírico. Prácticamente vacíos, están dominados por la línea diagonal que aparece tanto en las paredes como en las luces que se cruzan. Están presididos por una butaca de dentista de aspecto retrofuturista en los rojo y blanco corporativos. El resultado es fresco, joven, y también ligeramente aterrador, en eso no se diferencia del resto de salas de dentista del mundo.
Las salas de ventas, en cambio, están cubiertas por moquetas azules que las dotan de una imagen mucho más sosegada y menos intimidante. Bien pensado.
A lo largo de toda la clínica las curvas dominan el espacio, los elementos previamente existentes como los pilares han sido cubiertos con espejos para eliminar las barreras espaciales y añadir complejidad visual a través de los reflejos.
Sin duda, un giro de 180º que nos descoloca dando la vuelta a todo lo que pensábamos que sabíamos de las clínicas dentales.